Life of Agony – River Runs Red: 30 años del debut de la banda más grunge/doom de la escena hardcore

Ficha técnica

Publicado el 12 de octubre de 1993
Discográfica: Roadrunner Records
 
Componentes:
Keith Caputo - Voz, teclados
Joey Zampella - Guitarra, coros
Alan Robert - Bajo, coros
Sal Abruscato - Batería

Temas

1. This Time (5:42)
2. Underground (4:41)
3. Monday (1:31)
4. River Runs Red (1:55)
5. Through and Through (3:06)
6. Words and Music (5:13)
7. Thursday (2:10)
8. Bad Seed (5:40)
9. My Eyes (2:47)
10. Respect (4:16)
11. Method of Groove (5:17)
12. The Stain Remains (4:31)
13. Friday (3:35)

Multimedia




Escucha y compra

Este disco en Amazon: Life of Agony – River Runs Red: 30 años del debut de la banda más grunge/doom de la escena hardcore
Todos los discos de Life of Agony en Amazon


River Runs Red (1993) de Life of Agony es un álbum debut que no solo dejó huella en la escena musical de principios de los años 90, sino que también ayudó a definir un sonido único, que fusiona elementos de hardcore neoyorquino, metal y un toque de grunge misterioso reminiscente de bandas como Alice in Chains. Esta obra maestra, lanzada hace hoy tres décadas, se mantuvo fiel a su época, mientras llevaba su sonido en una dirección única y adelantada a su tiempo.

Como suele suceder en muchas ocasiones, estamos ante un álbum enormemente subestimado, y cualquiera que creciera musicalmente en los años 90 debería conocerlo sin tapujos. Con algunos ramalazos doomies e incluso sludge, este debut de Life of Agony es algo así como lo que obtendrías si tomaras a una banda como Cro-Mags, ralentizaras su música, incorporaras melodías al más puro estilo Alice in Chains y las capacidades musicales depresivas del grunge, y lo fusionaras con la pesadez del doom metal de Black Sabbath. En pocas palabras, es una mezcla de hardcore, metal (en ocasiones, bastante pesado) y grunge que es extremadamente difícil de encontrar en la música.

Además, River Runs Red es un álbum conceptual cuyo hilo conductor es el suicidio. Cuenta la historia de un joven con problemas que experimenta todo lo que le lleva al suicidio a través de pistas instrumentales, fragmentos de mensajes en contestadores automáticos y sonidos que representan una vida infeliz escondidos bajo los días de la semana; las pistas tres, siete y 13 se titulan «Monday», «Thursday» y «Friday» respectivamente. A lo largo de 50 minutos, la banda nos narra una historia que nos muestra como el protagonista se adentra cada vez más las profundidades más oscuras y tenebrosas del suicidio. La cosa (la tragedia) se desarrolla de la siguiente manera…

En «Monday» podemos escuchar como una madre, bastante histérica, no deja de gritarle a alguien, mientras un adolescente sube corriendo las escaleras, se entiende que de su casa, para encerrarse en su habitación. Acto seguido se escucha en su contestador automático que su novia ha roto con él.

Tres días más tarde («Thursday»), el pobre adolescente regresa a casa y se encuentra de nuevo con su madre gritándole que es un fracasado y que es igual que su padre. Vuelve corriendo a su habitación y escuchamos dos mensajes nuevos en su contestador automático. Uno de ellos es de su jefe llamándole para decirle básicamente que está despedido, mientras que el otro proviene de su instituto para decirle que no podrá graduarse a tiempo porque va a suspender dos asignaturas.

En el último corte del álbum, el que hace número 13, «Friday», volvemos a escuchar como nuestro protagonista regresa una vez más a su deprimente casa y su madre pasa de gritar a discutir completamente ida con su padre alcohólico. El niño simplemente sube corriendo las escaleras hasta el baño, cierra la puerta, abre la ducha y se corta las venas. Su madre abre la puerta y todo lo que escuchamos son sus gritos histéricos y el sonido del agua goteando.

En el resto de temas, los 10 que serían propiamente canciones, la voz de Keith Caputo, que aunque en ese momento sonaba sin desarrollar, ofrece un estilo vocal único que mezcla blues, lamentos deprimentes y gritos al más puro estilo hardcore. Su manera de cantar es incluso contagiosa; es una especie de mezcla entre Peter Steele y Glen Danzig. La guitarra de Joey Zampella logra una pesadez compacta que combina elementos serios, depresivos y, por momentos, incluso heavy. Los riffs son memorables y las partes pesadas son ideales para adentrarse en el mosh. Desde el primer acorde, el oyente se ve envuelto en una experiencia apasionada. El batería, Sal Abruscato (ex Type O Negative), y el bajista, Alan Robert, complementan la música de manera sólida. Todos los músicos destacan y se fusionan de manera excepcional. A pesar de las combinaciones aparentemente extrañas de estilos, la ejecución es sabia y gana impacto con cada escucha.

Canciones como «Underground» y «Words and Music» tienen grandes transiciones entre secciones aplastantes de doom, riffs por momentos bastante thrash y cambios de ritmo. «Through and Through», una de mis favoritas con ese inicio tan «Iron Man», acelera un poco las cosas con algunos riffs más rápidos con influencias, ahora sí, hardcore. «Bad Seed» presenta uno de los riffs más pegadizos del disco, mientras que «Method of Groove», la número 11, es otro ejemplo más del espíritu hardcore de la banda, con gang chants y un estribillo rapeado. Ésta, junto con la siguiente, «The Stain Remains», representan ‘los pasajes más neoyorquinos’ de este soberbio trabajo.

No hay ni un solo momento de relleno; el álbum es entretenido de principio a fin. La combinación de diferentes estilos funciona muy bien y deja una buen sabor de boca en el oyente. Life of Agony demuestra una profunda madurez musical y lírica, creando un álbum que va más allá de las convenciones del metal y el hardcore de la época. La producción es impecable, permitiendo que cada instrumento destaque sin abrumar la voz apasionada de Caputo.

River Runs Red es un álbum icónico, uno de los mejores debuts dentro del vasto mundo del metal de principios de los años 90, que ha envejecido excepcionalmente bien. Su mezcla de elementos musicales y su narrativa oscura y apasionada lo convierten en un clásico atemporal que sigue siendo influyente para las generaciones futuras. Este álbum es un testimonio de la creatividad y la expresión artística de Life of Agony y merece un lugar especial en la historia del rock y el metal.

Este álbum es una joya pasada por alto en el metal de los 90, que ofrece una experiencia auditiva pesada y turbia. En resumen, es de obligada escucha para l@s amantes del metal en general y una muestra de la verdadera brillantez de la banda.

Rubén de Haro
Sobre Rubén de Haro 531 Artículos
Tipo peculiar y entrañable criado a medio camino entre Seattle, Sunset Boulevard y las zonas más húmedas de Louisiana. Si coges un mapa, y si cuentas con ciertos conocimientos matemáticos, verás que el resultado es una zona indeterminada entre los estados de Wyoming, South Dakota y Nebraska. Una zona que, por cierto, no he visitado jamás en la vida. No soy nada de fiar y, aunque me gusta “casi todo lo rock/metal”, prefiero las Vans antes que las J'hayber.