Old Kerry McKee – Mono Secular Sounds

Nuestra Nota


7.5 / 10

Ficha técnica

Publicado el 23 de octubre de 2020
Discográfica: autoproducido
 
Componentes:
Old Kerry Mckee - Voz, guitarra, bajo, batería, teclado

Temas

1. South Spruce Blues (4:40)
2. Cattle And Wolves (5:16)
3. Gypsy Rags / Death, Oh Death Prt 2 (4:28)
4. I've Been Building (4:10)
5. Humming On The Porch (4:05)
6. Woman From Tarnava (7:26)
7. Anxiety Blues (4:15)
8. House Of The Rising Sun (3:53)

Multimedia


Escucha y compra

Este disco en Amazon: Old Kerry McKee – Mono Secular Sounds
Todos los discos de Old Kerry McKee en Amazon


Salir de tu zona de confort y de lo que escuchas regularmente siempre va bien. Cuando comentaron de reseñar el disco de Old Kerry Mckee, me lo pensé un momento, pero acepté rápidamente. Anteriormente había escuchado alguna cosa suya y me parecía que valía la pena ponerse a ello y decir cuatro palabras sobre él. Encima es un estilo que me gusta bastante, cierto es que hace tiempo que lo tengo muy olvidado, solo escuchando eventualmente cosas del estilo, el típico día que te viene por ponerte The Doors, Cream, cualquiera de esa época que me pase por la cabeza.

Old Kerry Mckee, no deja de ser curioso. Empezó como una idea de grupo de death metal, y ha acabado siendo un tío multi-instrumentista que en directo está atado a unas correas para tocar a la vez el tambor, la guitarra y por si no fuera poco un tocadiscos. Esto último clave para que todo se escuche añejo. Ah! Y que sepáis que de old no tiene nada, y de americano country sureño, tampoco. Sí es cierto que vivir en medio de la “nada” rodeado de naturaleza sueca, ayuda. ¿Qué podemos encontrar? Buff, de todo, una mezcla de rock, blues, country-folk, psicodelia, todo mezclado o según qué canciones, unas cosas o unas otras. Por momento estaremos con temas que nos pueden recordar a los The Doors de sus discos intermedios, como podemos pasar por Scott Mckenzie o Tom Waits.

Las canciones en general son de ritmo lento o medio tiempo, las más cañeras son por la voz que es chillona. Sonido áspero, nada de super producción actual. Realmente parece que estás en el limbo de finales de los 60, principios de los 70, vamos que podría pasar por un grupo que en su momento tocaba en el Whiskey a Gogo. Como he dicho, el tocadiscos es pieza clave para transmitirnos esa sensación vintage y de saturación. Dejando de lado los múltiples estilos, también encontraremos canciones ñoñas, temas muy blueseros, otros, pocos, cañeros, y otros tristes y melancólicos, todo aderezado con una voz más que digna que pasa desde la estridencia como por la tranquilidad y la paz.

¿Canciones? La gracia es la teletransportación que provoca este Mono Secular Sounds (2020), por lo que hablar de canciones es un poco absurdo. Sí que es cierto que quizá hay un poco de monotonía entre medio del disco, con unos temas demasiado similares. Pero podemos destacar canciones. El inicio con «South Spruce Blues» es un muy buen tema para empezar el disco, con armónica incluida, voz psicotrópica y cierto toque de oscuridad. Oscuridad que ha perdido desde los inicios de la banda.

Podemos continuar con «Cattle and Wolves» ésta bastante más blues, recordando a momentos de los The Doors. «I’ve Been Building» que puede recordar a Scott Mckenzie con su tema «San Francisco». «Anxiety Blues» es otro temazo, con gritos desgarradores y voz ultra saturada. Y la última «House of the Rising Sun», cambia de registro para convertirse en una canción ágil, ultra sureña y auténtica, aunque puede parecer que de auténtica no tenga nada, viniendo de un tipo que es del otro lado del mundo.

Es un disco que se tiene que escuchar. Si te mola todo el rollo de esa época, Old Kerry Mckee no es que dé el pego, es que lo sientes como si fuera un grupo americano de hace cincuenta años. Y siempre es agradable escuchar algo más genuino y auténtico, no tan prefabricado, masterizado y pasteurizado a más no poder. La suciedad también mola, y en el caso que nos ocupa es suciedad muy bien ejecutada.

Dídac Olivé
Sobre Dídac Olivé 176 Artículos
Soy de esa generación que la “post-pubertad” lo pilló entre el metal primigenio (lo que llamamos ahora old school) y la nueva ola que fue el Nu metal, es decir, pasado mediados de los 90. Me encantan muchos estilos pero sobretodo el rock clásico y evidentemente el metal, este último es una forma de vida y encima me gusta desgranar y reconocer la riqueza de todos sus subgéneros. Uno ya tiene su edad (los mechones blancos en la barba no están por que sí) pero no me cierro para nada a grupos nuevos, eso sí, mientras haya fuerza y calidad, aunque hoy en día hay mucha. Como nacido justo entrados los ochenta también se incluye que soy un friki de cuidado (rol, videojuegos, Star Wars, pelis Gore, literatura fantástica y un largo etc.) vaya que toco de todo un poco. En resumen, espero contagiaros mi pasión metalhead a la vez que disfrutáis de mis aberrantes destripes.