The Brotherhood of the Woodsmen – Back From the Grave

Nuestra Nota


7.5 / 10

Ficha técnica

Publicado el 13 de noviembre de 2017
Discográfica: The Brotherhood of the Woodsmen
 
Componentes:
Marc González – Voz, guitarra
Albert Pons – Batería

Temas

1. Stalagmite (1:40)
2. Knife (1:16)
3. Irony (2:57)
4. Spirit Punch (1:38)
5. Needle (1:15)
6. Ghosts (2:55)
7. Flannel (3:06)
8. Graveyard (4:20)
9. Nutshell (1:13)
10. Purple (2:42)
11. Stalactite (3:22)
12. Sarcògraf Amorós (1:20)
13. Spider Web (1:43)
14. Pi Negre (2:48)

Multimedia



Escucha y compra

Este disco en Amazon: The Brotherhood of the Woodsmen – Back From the Grave
Todos los discos de The Brotherhood of the Woodsmen en Amazon


La reseña de hoy es un poco curiosa, ya que este disco salió a finales de 2017 pero aprovechando que el pasado jueves, 7 de enero, vio la luz en varias de las principales plataformas digitales, he pensado en hacer una pequeña crítica sobre este gran trabajo que tengo entre manos.

¿Por dónde puedo comenzar? Pues mirad, The Brotherhood of the Woodsmen, es un grupo de mi ciudad, Igualada. Se formó un poco por casualidad por dos músicos de diferentes bandas de cierto renombre en la zona. Por un lado está Marc González, conocido por tocar la guitarra en el grupo Unborn y los Albatros, que hacían un rock progresivo, y por el otro lado está lado Albert Pons, batería unos cuantos años en Faèrica, con un estilo post-rock, metal progresivo, con toques sinfónicos, ya que había un violinista entre los componentes. Y actualmente está con Primo Zon y Los Culpables de Todo. ¿Y cómo comenzó el proyecto? Pues Marc y Albert, que ya se conocían de bastantes años atrás, hacía tiempo que decían de hacer alguna grabación conjunta. Entonces Marc hacía un tiempo que estaba sin grupo tras la disolución de Unborn y Albatros, y con Albert se animaron a quedar un día y probar suerte.

El día que quedaron para tocar, experimentaron con un primer tema que ya tenía en mente Marc y de ahí surgió todo, tirando para adelante y creando más temas. Desde un principio ya vieron que se entendían a la perfección, gracias también a sus gustos musicales similares. Marc González tiene un estilo muy rítmico y como Albert lo seguía bien, pensaron en hacer algo diferente y no poner ningún bajo. Quedarse como un “power duo” vamos, en este caso, por un lado Marc a la voz y guitarra y Albert a la batería. Iban quedando y saliendo canciones, hasta que decidieron hacer la grabación, que fue en Furinyaki Records. Hay la curiosidad que primero grabaron la música y después la letra. Comentaban las sensaciones de cada canción y de allí salió un disco conceptual, que trata sobre un personaje o un “ser” que está hasta los cojones de todo, de la ciudad, del estrés, y se va al bosque a vivir en una cueva. Allí le pasan una serie de peripecias, tales como pasar hambre, tener que aprender a cazar y hacer muchas cosas nuevas para sobrevivir. Pero también otros sucesos como encontrar a faltar su vida anterior, mono por las adicciones que tenía, cosas así.

¿Qué os encontraréis en este Back from the Cave (2017)? Aquí se nota muy mucho las influencias de los dos componentes. Grupos desde Soundgarden, Nirvana o Melvins, pasando por otros como Queens of the Stone Age o Black Sabbath. Ellos dicen que hacen grunge setentero y toques punk. El disco cuenta con catorce canciones, siete de las cuales no superan los dos minutos de duración, por lo tanto podríamos decir que ya parte con una de las premisas en los estilos de los que se alimenta The Brotherhood of the Woodsmen.

Back from the Cave (2017) Comienza de manera cañera con “Stalagmite” y “Knife” canciones potentes y enérgicas, el sonido de la guitarra con un toque “sucio” y distorcionado le da un aire stoner y de hace décadas. Con “Irony” se nos presenta un tema que bebe mucho de Black Sabbath o Melvins según que disco, tanto en el cambio en el timbre de voz como un ritmo más oscuro y pausado. “Spirit Punch” y “Needle” tienden a un estilo más grunge. “Ghosts” una canción preciosa. Tiene un riff continuo que te engancha, batería de ritmo lento y un estribillo muy “Sabbathaniano”. “Flannel” sigue otra la senda más grunge.

Otro temazo es “Graveyard” con un comienzo a lo The Doors, para entrar en trance, acompañado de unos tambores tribales y un riff psicotrópico, para pasar a una parte con una guitarra más melódica y sonido de agua, y terminar de forma fiera hasta morir lentamente. Contínamos con “Nutshell” o “Purple” que siguen en la línea del grunge con algún toque punk. “Stalactite” le da un soplo de aire fresco con un comienzo diferente y combinarlo con toques de rabia, para a mitad de canción hasta el final, pasar a una combinación de ritmos sin parar de guitarra y batería. “Sarcòfag Amorós” es la primera canción que ya había compuesto Marc antes de quedar con Albert y crear The Brotherhood of the Woodsmen. El tema es dinámico y bastante intenso con unos buenos riffs. “Spider Web” coge otra vez, un poco la esencia de Black Sabbath. Y terminamos con “Pi Negre” canción instrumental de comienzo preciosista para continuar con una base grunge y con un buen toque de progresivo.

Media hora de música intensa donde os encontraréis de todo. Realmente Albert y Marc se nota que se compenetran a la perfección y han sacado un buen disco, y encima con algunos temas realmente espectaculares. Los he visto en directo y aparte que lo petan, en ningún momento encuentras a faltar un bajo. Para los amantes de los estilos y grupos que he comentado, Back from the Cave (2017) será de vuestro agrado. A mí me ha gustado mucho, y no soy un fan ni del punk ni del grunge pero la mezcla entre otros géneros y un sonido característico y mutante, pero sin perder en ningún momento su propia identidad, hace que estés escuchando algo viejo pero a la vez fresco, y esto cuesta bastante.

Dídac Olivé
Sobre Dídac Olivé 176 Artículos
Soy de esa generación que la “post-pubertad” lo pilló entre el metal primigenio (lo que llamamos ahora old school) y la nueva ola que fue el Nu metal, es decir, pasado mediados de los 90. Me encantan muchos estilos pero sobretodo el rock clásico y evidentemente el metal, este último es una forma de vida y encima me gusta desgranar y reconocer la riqueza de todos sus subgéneros. Uno ya tiene su edad (los mechones blancos en la barba no están por que sí) pero no me cierro para nada a grupos nuevos, eso sí, mientras haya fuerza y calidad, aunque hoy en día hay mucha. Como nacido justo entrados los ochenta también se incluye que soy un friki de cuidado (rol, videojuegos, Star Wars, pelis Gore, literatura fantástica y un largo etc.) vaya que toco de todo un poco. En resumen, espero contagiaros mi pasión metalhead a la vez que disfrutáis de mis aberrantes destripes.