Svart Crown – Wolves Among the Ashes

Svart Crown son una banda francesa de blackened death metal que acaban de publicar su quinto disco de estudio. Hace unos días nos llegó en formato físico este Wolves Among the Ashes, y al ver la monolítica portada la curiosidad pudo conmigo. Hace ya varios meses que el disco está en el mercado, pero nunca es tarde para descubrir a grupos de calidad.

Lo primero que llama la atención es el concepto artístico que envuelve el estuche del cd y el libreto. Cubiertos de tonos negros y grises, muestran imágenes de piedras volcánicas y cuerpos carbonizados, donde destacan algunos sutiles hilos de lava. Realmente han sabido encontrar una imagen que le va como anillo al dedo a su sonido. En general, el ritmo de las canciones es más bien lento, con riffs pesados de los que emanan melodías trágicas y melancólicas.

También hay lugar para unos cuantos blast beats y partes más veloces, como en “Thermageddon”, que entra furiosa tras una introducción que nos avanza lo que vamos a escuchar mientras una voz recita solemnemente. Las voces guturales son tan brutales como la parte instrumental y en ocasiones podemos disfrutar de registros más limpios que aportan melodía. Es inevitable ver ciertas similitudes con la música de Gojira, en especial en las partes con groove y en el uso de ciertos recursos guitarreros, aunque el estilo de Svart Crown es consistentemente más oscuro, con una carga de black metal que se nota más en el ambiente que saben crear que en lo estrictamente musical.

En las siguientes “Art of Obedience” y “Blessed Be the Fools” los ritmos se van enlenteciendo progresivamente dejando que el groove tome más protagonismo. Es difícil aguantar sin mover la cabeza ante una batería más que contundente y unos riffs grandilocuentes y disonantes que emanan desesperación. Subimos de intensidad con “At the Altar of Beauty”, que llega como una tormenta. El riff principal de influencia blacker se va repitiendo y variando ligeramente a lo largo de la canción, combinado con algunos momentos de calma, hasta el estruendoso final.

“Down to Nowhere” contrasta con lo anterior con un poco de calma. Unas voces cansadas, como si se estuvieran arrastrando, se convierten en melódicas en el estribillo que representa el clímax de la canción. La parte instrumental hace algo similar, empezando con una guitarra sin distorsión que marca un patrón simple y se va llenando, acabando con varias capas de sonido que se van armonizando entre si. Seguimos con “Exoria”, llena riffazos a lo Gojira. En un momento, las guitarras descargan a gran velocidad mientras la batería marca un ritmo calmado para después cambiarse los papeles, resultando en un punteo lento con blast beats de fondo. Gran detalle.

Llegamos al final con “Living with the Enemy”, que también empieza tranquila pero enseguida nos sacude por última vez con más ritmos de plomo. Siendo la más larga del álbum, con más de ocho minutos, tiene tiempo suficiente como para hacer un repaso a los diferentes elementos que hemos visto anteriormente y explayarse en algunas secciones. En cuanto a la producción, han sabido conseguir unos tonos de guitarra desgarradores, además de un bajo presente y muy potente. La batería suena a menos volumen que en la mayoría de discos de metal extremo, cosa que queda perfectamente en esta mezcla y les permite a las cuerdas tomar el protagonismo.

En resumen, muy buen trabajo de Svart Crown que consigue crear un ambiente oscuro y denso sin hacer pesada la escucha. Tiene una buena dinámica entre las diferentes canciones y una fusión muy bien conseguida de diferentes corrientes del metal extremo, sin dejar de lado la melodía cuando conviene. Si prefieres la música que va al grano, quizá alguno de los cortes de Wolves Among the Ashes se te haga un poco largo, pero si le das varias pasadas le acabarás cogiendo el gusto. Me quedo con las ganas de ver como defienden estos temas en directo, ¡estad atentos por si la temporada que viene se dejan caer por aquí!

Aleix Besolí

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Me metí en esto del metal a los 14 años, y de concierto en concierto he ido descubriendo las bandas nacionales e internacionales que forman parte de este mundillo. Ahora aporto mi grano de arena a Science of Noise contando lo que pasa en los eventos de la zona y algunas novedades discográficas.

También toco la guitarra y el bajo en algunos grupos de la escena local. Tengo los huevos pelaos de tocar en el Ceferino.