Cobra Spell – 666

Finalmente, Cobra Spell ofrece su debut discográfico. La principal impulsora del grupo y fundadora, Sonia Anubis (ex Burning Witches, Crypta o Sepiroth entre otras), ha ido dando señales desde 2020 en forma de EP, singles y con constantes cambios de formación parece haber dado con la fórmula con la que se siente a gusto. Nos presenta una banda con Noelle dos Anjos a la guitarra, Kristina Vega a las voces, Hale Naphtha a la batería, Roxy Herrera al bajo y la misma Sonia Anubis a la guitarra y sintetizadores.

La esencia del disco es, sin ninguna duda, reivindicar el empoderamiento femenino con precisamente lo que era todo lo contrario en los 80. Música y temática más que utilizados en la época haciendo referencia al sexo, la fiesta y demás.

Se abre la fiesta con “666”, una intro con inicio suave de teclados que te recordará a las bandas sonoras de las películas de los 80. “S.E.X.” te engancha con ese riff inicial pegadizo, festivo y que emana hard rock por los cuatro costados. Las voces se combinan y acompañan perfectamente a los dibujos y melodías de guitarra que acompañan junto a los bendings. Comedidas en primer término pero van acaparando protagonismo. Se nota que no buscan excesivo protagonismo, pero no se renuncia a mostrar el poder de Kristina si el tema lo requiere. Hacia la mitad, las guitarras muestran en solitario su poder bien ancladas en el hard rock de los 80 sabiendo recoger lo mejor de entonces con lo que se puede esperar hoy del estilo.

El riff inicial de “Satan Is a Woman” me ha recordado al “Indians” de Anthrax aunque el tema no tiene nada que ver. Bajo machacón que marca el tema con los acordes al aire en una pieza muy sleazy, festiva y pegajosa.

“Hotline 666” es una intro simulando una sensual llamada a un servicio sexual que enlaza con “Bad Girl Crew”, la historia de una chica con ganas de fiesta en la que musicalmente el toque sleazy se acentúa. Festiva y dinámica. “The Devil Inside Me” sorprende ya que se decanta por un estilo mucho más metálico recordando a Judas Priest con toques de power. No podía faltar la balada que, “Fly Away” cumple sobradamente. Vuelve el toque de sintetizador y ambiente festivo con “Love = Love”. Te puedes imaginar fácilmente en coche o moto a toda velocidad y la música a todo volumen, más cuando suena el solo de saxo final. Un buen toque de un instrumento nada utilizado en el mundo del rock.

Con “Love Crime” vuelve la vena más metálica en la misma onda que “The Devil Inside Me”. “Warrior From Hell” es todo un himno rockero que te hará levantar el puño con buenos riffs. El dúo final lo tenemos con las festivas “You’re a Cheater”, en una fórmula que hemos visto repetida decenas de veces y “High on Love” que te recordará a los W.A.S.P. más clásicos.

Lo mires por donde lo mires, te lo vas a pasar bien.

Albert Perera

Live After Death tuvo la culpa de todo y tantos años después aquí seguimos. Si hay algo que me gusta más que escuchar música es hablar sobre ella y difundirla… y en ello estamos durante más de dos décadas.