Vader – Solitude in Madness

Nuestra Nota


8.5 / 10

Ficha técnica

Publicado el 1 de mayo de 2020
Discográfica: Nuclear Blast
 
Componentes:
Peter - Voz, guitarra
Spider - Guitarra
Hal - Bajo
James Stewart - Batería

Temas

1. Shock And Awe (2:16)
2. Into Oblivion (2:24)
3. Despair (1:18)
4. Incineration of the Gods (3:32)
5. Sanctification Denied (3:35)
6. And Satan Wept (3:17)
7. Emptiness (2:40)
8. Final Declaration (2:16)
9. Dancing In the Slaughterhouse (2:28)
10. Stigma of Divinity (1:47)
11. Bones (3:56)

Multimedia



Escucha y compra

Este disco en Amazon: Vader – Solitude in Madness
Todos los discos de Vader en Amazon


Vader lleva desde el lejano año 1983 en activo y parece que estos 37 años de carrera no les pesen para nada ya que los veo más en forma que nunca. La verdad que los adelantos me dejaron un tanto frío pero al poder disfrutar de todo el disco me han sorprendido gratamente. No inventan nada y no han variado mucho su estilo en estas casi cuatro décadas pero no les hace falta para nada. Aunque si hay que decir que han añadido algunos (pocos) nuevos elementos que los hacen más dinámicos y desde la primera escucha enganchan mucho.

Hace aproximadamente una década que Peter encontró una formación estable y muy equilibrada y este detalle se nota. Están muy conjuntados y van a una, sangre joven que le da un plus a su maestría a la hora de ejecutar unos riffs de guitarra muy directos, agresivos, sin fisuras y unos solos vertiginosos con esos golpes de palanca que recuerdan mucho a Slayer pero con su sello propio. La batería es una maravilla yendo casi siempre a una velocidad inhumana tanto en los blast beats como en los frenéticos dobles bombos. Y vamos, se nota que James Stewart es el más joven de la formación pero tiene una pegada que muchos ya querrían y por algo está actualmente en seis proyectos, casi nada.

El disco tiene una duración que roza la media hora, o sea, un minutaje perfecto para escucharlo del tirón, un trabajo directo con canciones que se mueven entre los dos y los cuatro minutos y es que casi siempre nos han ofrecido canciones de este estilo, con las florituras justas y que van por faena sin marear la perdiz. La voz de Peter sigue igual que hace muchos años, incluso diría que mejor. Modula muy bien y su pronunciación es impecable y en ocasiones es ayudado por coros muy thrashers y es que la influencia de este estilo siempre ha quedado patente a lo largo de su extensa discografía siendo este Solitude in Madness su décimo sexto álbum.

Ponerme a hablar de cada canción en esta crítica lo veo innecesario ya que todas y cada una de ellas se mueven por los mismos derroteros y si conocéis los anteriores trabajos y sois seguidores de los polacos lo vais a disfrutar mucho. Sus señas de identidad son el death y el thrash balanceados a la perfección, cogiendo también influencias del heavy clásico con unos cambios muy orgánicos que fluyen perfectamente por tus oídos sin que nada rechine. Ninguna canción está de más, ningún riff está forzado y es un auténtico deleite para los sentidos. Además, al ser corto no se hace pesado para nada y las canciones se pasan de una volada. El corte que podría ser un poco diferente del resto es el último llamado «Bones», el de más duración y que reúne esos elementos más clásicos. El resto es un festival de velocidad que os va a volar la cabeza, sin duda. Seguro que cuando termine tendréis ganas de darle al play de nuevo para volver a sentir ese bombo atravesar vuestras entrañas y como Peter se deja la garganta escupiendo sus versos sobre oscuridad, guerra y cagándose en la religión.

Sorprende que un grupo que lleva tanto tiempo no haya aflojado para nada y que continue ofreciendo una música tan elaborada que aunque repiten patrones vistos anteriormente lo hacen de una manera muy natural y saben añadir esos pequeños detalles para no aburrir ni un solo segundo. Dadle al play y disfrutad.

Robert Garcia
Sobre Robert Garcia 427 Artículos
Death, thrash, djent, dark, progresivo, doom, black, experimental, jazz, clásica, electrónica... La música me mantiene vivo, es una droga que da sentido a este extraño sueño llamado vida. Músico autodidacta, guitarrista, cantante y enfermo de escuchar y escuchar música sin parar.