¿Cómo ha influido el Imaginations de Blind Guardian en nuestra escena power metal?

El power metal reinó a finales de los noventa bajo el liderazgo de bandas como Helloween, Gamma Ray y Blind Guardian, y hubo un momento que los bardos fueron los auténticos líderes del estilo gracias a lo épico de su música, a lo fascinante de su temática y a lo atractivo de sus portadas. En motivo del vigésimoquinto aniversario de una de las obras cumbre de los de Hansi Kürsch, hemos querido contactar con algunos actores de la escena power metal española, tanto a nivel de músicos como de periodistas, para que nos explicaran su opinión de este disco y la influencia que ha tenido en su evolución musical. ¡Gracias a todos y todas por participar!

 

Iván Allué (escritor y redactor de Metalcry)

Mi primer contacto con la banda, si mal no recuerdo, fue a través del programa Sputnik de TV3. Emitieron el vídeo de “Bright Eyes”. Me gustó, pero si os soy sincero no les presté demasiada atención hasta años más tarde. Y eso que yo creo que es una pieza clave del movimiento power. Si tuviéramos que hacer un ranking con los 10 imprescindibles, Imaginations from the other Side tendría su lugar. Tiene todo lo que caracteriza al género: baterías a toda pastilla, melodías pegadizas, guitarras dobladas, letras de fantasía basadas en la literatura…

En la escena, obviamente son un claro referente. No cabe duda de que su estilo personal ha influido a gran cantidad de bandas en todo el mundo. Diría que BG es un grupo clave a la hora de entender el heavy metal y su evolución. En cuanto a mi carrera, debo confesar que me enganché tarde a la banda. No les presté la suficiente atención hasta el Night at the Opera. A pesar de ser un disco que no convenció a muchos, en mi caso fue este el que me ayudó a descubrir sus entregas anteriores. Poco a poco, me fueron enganchando, hasta el día de hoy. Asimismo, a pesar de que no llevan mucha parafernalia en directo, y de que Hansi no es Bruce Dickinson precisamente, siempre he disfrutado muchísimo en sus conciertos.

En mi opinión, más que el Imaginations…, el definitivo es Nightfall in Middle Earth, de 1998. En este disco, los alemanes apuestan por un álbum conceptual basado en el Silmarillion de Tolkein. ¿Puede haber algo más atractivo y friki para el fan del power noventero? Pero bueno, va a gustos. El Imaginations… sentó las bases de lo que sería el Nightfall..”, sin duda. BG empezaron haciendo un thrash speedico, para luego recargar sus obras con un montón de detalles y elementos, y fue en el Imaginations… donde encontramos ese punto de inflexión, eso es cierto. Con lo cual, estoy de acuerdo en que significó un antes y un después en su carrera.

El recuerdo que tengo de los noventa es inmejorable. Mi adolescencia pasa por ahí, así que con eso queda todo dicho. Con la pre-adolescencia es tiempo de descubrir bandas, de dejarse crecer la melena… luego ya empiezas a salir de compras por la calle Tallers de Barcelona, te pasas por antros como el Tequila, el Mephisto, el Sr. Lobo, el Aquelarre… y acabas recordando con mucho cariño las tardes de fiesta (sin alcohol) en el Dixi 724. A finales de los noventa resurgió el heavy metal en España y el power europeo estaba en auge, gracias, entre otros, a BG… y eso lo he vivido de primera mano. Recuerdo la primera vez que vi a Hammerfall y a Gamma Ray, en un “Menorock”… mi primer concierto de Marilyn Manson el en Palau d’Esports… el llenazo de Dover en la Zeleste… cómo flipábamos con el metal-tribal de Sepultura… Recuerdo también que en esa época el nu metal apareció casi por sorpresa, pisando muy fuerte, así que debías posicionarte: o eras “heavy de pitillo” o te dejabas abducir por los scratches y el chándal Adidas. ¡Y ya paro que si no estamos aquí hasta mañana!


José F. Amat (batería de Lándevir)

Yo conocí a Blind Guardian a través de mi hermano que era, es y será uno de los mayores fanáticos de la banda en este país. Vivíamos juntos en aquellos tiempos –lógicamente- y a fuerza de escucharlo en la habitación de al lado fui poco a poco conociendo sus canciones, aunque yo era más hard rockero. Curiosamente fue con el disco del que hablamos con el que me enganche a los Guardian, ya que es un disco que va mucho más allá del power metal. Es un disco épico, único, diferente y personal, con el cual crearon su particular estilo, con esos arreglos de guitarras tan personales,  multitud de orquestaciones, coros grandiosos…, que luego han creado escuela. Yo lo catalogaría como una obra de arte con melodías eternas, como la de “Bright eyes” o “And the story ends” por decirte alguna.

En Lándevir quizá estemos un poco alejados de este estilo y no se puede decir que nos hayan influenciado demasiado, quizá sí en la importancia otorgada a las melodías vocales, buscando siempre una melodía pegadiza y bonita tanto en estrofas como puentes o estribillos. En la escena del heavy metal mundial son una de las bandas referentes, por tanto su influencia es enorme.

El Imaginations me parece, sin duda, el disco cumbre de su carrera, seguido de cerca de “Nightfall in middle earth”, pero con “Imaginations” dieron el salto cualitativo a nivel de composición y producción que les hizo entrar en el universo de los grandes, creando un sonido totalmente único y personal.

Lo estoy escuchando mientras escribo estas líneas y no puedo sino viajar al pasado, a mis 18-20 años, en la época de la universidad, cuando empecé con las primeras bandas “medio” serias, y sobre todo, cuando empezamos con Lándevir, en el año 98. Fueron tiempos inolvidables la verdad… aquellos primeros festivales de rock… somos viejos rockeros!! De hecho me estoy dando cuenta que me sé las letras… en aquella época nos comprábamos todos los cds y leíamos el libreto con mucha ilusión, cada cd era como una pequeña joya… como ha cambiado la cosa, ha perdido mucho encanto. Pero seguiremos en la lucha! Gracias por contar con Lándevir para esta iniciativa.


César Arroyo (bajista de Nocturnia)

Escuché por primera vez a Blind Guardian en el instituto, en una cinta que me pasaron y además fue precisamente este disco. Lo recuerdo como algo que me impactó mucho, por esa mezcla de épica y agresividad en los temas. No soy mucho de etiquetas así que diré que fue un estilo que abrió unas puertas en la música que nadie se hubiera imaginado antes. Blind Guardian se pusieron a la cabeza con este disco en cuanto al heavy metal.

En mi faceta como cantante quizás me influyó mucho cómo desgarra en los temas Hansi Kürsch y cómo componen las melodías y las letras. Pero también me enseñó a cómo no estar en un directo como frontman… se mueve menos que los ojos de Espinete.

Creo que hay discos que cierran y abren etapas a la vez. Cierran un ciclo de discos de música mucho más en la línea de otras bandas de la época y abren su estilo a una nueva perspectiva más orquestal, más elaborada y compleja. Es el típico disco que los puristas extremos dirán que después de eso no han hecho nada bueno, al estilo de las críticas que se hacen a Metallica. En mi caso, es el disco que más me gusta, pero me encanta también por ejemplo Somewhere Far Beyond.

En esos tiempos estaba en el instituto e introduciéndome en el mundo del heavy. Ha sido banda sonora de muchas de mis macarradas de aquella época


Tony Delgado (vocalista y guitarrista de Dünedain)

Yo siempre fui seguidor de Iron Maiden, fue con la banda con la cual empecé a escuchar metal y, bueno, justo después llegaron Helloween y Manowar. La verdad es que siempre solía ver en la Discoplay y en la Tipo (revistas) las portadas de Blind Guardian, pero nunca me atrevía a pedir nada…me lo gastaba todo en Maiden, hasta que un día alguien vino con un disco de Blind Guardian, es más, ese disco era el “Imaginations” como lo llamábamos nosotros. Creo que fue mi primo, el guitarra rítmico de Dünedain. Entonces lo escuché y se me rompieron muchos esquemas.

Para mí no es un disco catalogable dentro de la escena Power, o al menos al cien por cien. Blind Guardian son una banda muy personal, la música que hacen es única, no entra directamente en los cánones del power metal como tal. Poco tiene que ver este disco con cualquiera de Stratovarius de aquella época, o de Gamma Ray o Helloween, ellos eran estrellas del power metal, pero cuando hablabas de Blind Guardian todos se giraban siendo conscientes de que hablabas de algo más auténtico y genuino. Hablabas de heavy metal en estado puro. Respecto a sus tintes power, diría que es por los dobles bombos que hay a lo largo de todo el disco, pero ninguno es de manera lineal facilota… repito que poco tiene que ver con bandas “fáciles” como las que he citado. Blind Guardian estaban más dentro del speed metal, o incluso del thrash metal si me apuras, eran thrash metal melódico diría yo… jajaja… al menos hasta el Imaginations. Los grandes coros que se ven a lo largo de todos los discos de la banda o casi todos, pues también le aportan ese toque power, pero las guitarras, las bases rítmicas super elaboradas, los cambios de dinámica en medio de las canciones, rozan el progresivo en algunos pasajes, en fin, ese disco y los dos anteriores son obras maestras irrepetibles y ninguna catalogable al cien por cien en ningún cliché.

En mi forma de hacer música han influido directamente, ya que nosotros cuando empezamos hacíamos varias versiones de ellos. Tuve oportunidad de verles en la gira de su siguiente disco “Nigthfall in Middleearth” en Madrid en La Riviera, en el año 98 creo, y me marcó profundamente. Después de aquello nunca me perdía ni un solo concierto. Mi primo se compró toda la discografía poco a poco y me la iba dejando, y alucinábamos literalmente. Aprendimos a hacer música con ellos directamente y su influencia aún sigue latente en algunas composiciones de Dünedain.

Respecto a su influencia en la escena, creo que la banda tuvo un momento realmente glorioso a nivel mundial. Fueron de las primeras bandas alemanas catalogadas como heavy o power de los 90s en reventar a nivel mundial, justo antes de ellos estaba Helloween pero ellos son de los Ochenta y los Blind Guardian coparon los noventa. Veías camisetas de ellos en todas partes, y además cuando alguien llevaba o escuchaba Blind Guardian le mirabas de otra manera, como alguien más “cool” dentro del panorama. En aquellos años lo normal era ver a todo dios con camisas de Maiden.

Sin duda el disco supuso un antes y un después en la carrera de Blind Guardian, y yo realmente sí que creo que fue el disco que definió su estilo al cien por cien, fue su culmen a nivel compositivo. Después vino otra obra maestra pero el Imaginations les definió como BLIND GUARDIAN al mil por cien. Si que pienso que es su disco definitivo. Todo son temazos, tiene una atmósfera increíblemente aterradora/fascinante/épica, realmente es un viaje al centro del algo poderoso. Es un disco estremecedor. Sin duda para mí lo es.

Todo lo que me lleva son bonitos recuerdos. Tuvimos la gran suerte de poder vivir lo que fue la explosión del power metal europeo de los 90s de lleno, digo tuvimos porque mi primo y yo siempre estábamos juntos y escuchábamos la música, íbamos a todos los conciertos juntos y alucinamos. Es una época que nos marcó profundamente y que jamás se volverá a vivir. Antes la música se vivía. Ahora la música se consume de manera muy friki. Recuerdo que en aquellas épocas no había bandas en España que se acercasen a ese nivel de virtuosismo y epicidad y entonces fue cuando decidí  intentar hacer una que lo consiguiera, jajaja. Fueron momentos gloriosos para mí. Ahora les recuerdo y les rindo mi particular homenaje cada vez que subo a un escenario. Jamás volverán.


Alfonso Díaz Cazorla (redactor de RafaBasa)

Para el que suscribe estas líneas Blind Guardian son una banda imprescindible para lo que el fue el heavy metal, por lo menos si lo circunscribimos al Viejo Continente, e “Imaginations From The Other Side”, su álbum definitivo. Seguramente para muchos actualmente el power metal sea un estilo amortizado y ya caduco, pero si viajamos a principios de la década de los noventa, lo cierto es que la propuesta de estos jóvenes alemanes que ya se habían dado a conocer con sus cuatro entregas previas, sonaba fresca y potente, y parecía situarles en el punto de mira de las nuevas generaciones mientras veíamos como la oleada de bandas grunge provenientes de Seattle relegaban al segundo a plano a nombres que hasta ese momento habían sido imprescindibles como Iron Maiden, Scorpions o Judas Priest, o directamente los condenaban al ostracismo absoluto como sucedió con la mayoría de bandas de hard rock melódico y glam.

A principios de los noventa no existía internet, y por lo menos para mí el acceso a programas de televisión y radio extranjeras donde tenía cabida el material que me gustaba era bastante complicado, con lo que las únicas fuentes para enterarte de lo que se cocía dentro de la escena internacional eran las revistas mensuales, algún fanzine, y programas como Disco Cross o la Emisión Pirata. Y fue precisamente en el espacio que dirigía el desaparecido Mariano García donde escuché por primera vez a Hansi Kürsch y sus muchachos dando buena cuenta en directo de “Welcome To Dying”. Al día siguiente recuerdo ir al carrer Tallers buscando aquel disco que se titulaba “Tokyo Tales”. Y he de admitir que desde que lo escuché por primera vez me convertí en un fiel seguidor del, por aquel entonces, cuarteto de Krefeld, que posteriormente me enteré que había apadrinado Kai Hansen.

De cara a esta quinta entrega de estudio del combo alemán hay muchos detalles que llaman la atención como el mayor peso de su base rítmica, lo afilado de sus guitarras, lo grandilocuentes y pomposos que suenan algunos de sus coros…, por lo que creo que cobra trascendental importancia la figura del productor Flemming Rasmussen. Si hasta ese momento Blind Guardian habían apostado por la estabilidad y confianza que les daba trabajar con Kalle Trapp tras los controles, para este nuevo trabajo el cuarteto quiso probar cosas nuevas y para ello apostó por un valor seguro como era el danés ya que había trabajado con Metallica en álbumes como Ride the Lightning, Master of Puppets o … And Justice for All. En cuanto a la portada volvió a correr por cuenta del afamado dibujante Andreas Marschall. Además la banda también contó con un gran elenco de invitados, destacando especialmente la presencia de Mattias Wiesner, Piet Sielck o Ronnie Atkins.

Pero si nos centramos en lo más importante, la música, lo cierto es que creo que los germanos consiguieron alcanzar su cenit musical, creando una obra que personalmente pienso nunca han sido capaces de superar, y es que “Imaginatios From the Other Side”, se ha convertido por derecho propio en uno de los lanzamientos más importantes de la década de los noventa, en cuanto a la escena europea se refiere. Y es que a día de hoy sigue poniendo los pelos de punta escuchar las trepidantes cabalgadas que encierran trallazos absolutamente imparables como “I’m Alive”, con esos interludios acústicos que sirven para acentuar todavía más su tenacidad metalera, la devastadora “Born in a Mourning Hall”, o la aniquiladora “Another Holy War”, que servía de nexo de unión con su pasado.

Pero no todo iba a ser velocidad e intensidad metalera, ya que la faceta más preciosista y lírica de los germanos impregnaría temas como “A Past And Future Secret”, invitándonos a viajar con la imaginación hasta la corte de cualquier castillo medieval, anticipándonos de alguna forma lo que llevarían a cabo en el futuro en algunos temas de “Nightfall In Middle-Earth”. Tampoco faltarían otros temas en los que la banda mostraba su plena madurez y su intención de no repetir los esquemas que ya habían desarrollado en sus anteriores entregas. Así que las encargadas de mostrarnos su faceta más vanguardista y hasta progresiva fueron la fantástica “Bright Eyes” y la final “And The Story Ends”, en la que los grandilocuentes coros se encargaban de poner el punto épico a un trabajo absolutamente insuperable.

Como puedes ver todos, absolutamente todos, los temas tienen elementos y detalles que hacen que con cada escucha uno pueda percibir nuevas tesituras y matices. En definitiva que Blind Guardian consiguieron alcanzar su techo como banda con “Imaginations From The Other Side”, convirtiéndose en una de las bandas más populares y emblemáticas del panorama europeo. Además la banda supo defender el material en directo lo que les acabó convirtiendo en uno de los abanderados del power metal en la segunda mitad de los noventa, ocupando los lugares de privilegio dentro de los festivales de metal que poco a poco iban floreciendo en el Viejo Continente, especialmente en Alemania.


Eduardo Dizy (guitarrista de Arenia)

Pues casualmente fue a raíz del lanzamiento del «Imaginations». Por aquel entonces comenzaba a hablarse en los medios especializados cada vez más de Blind Guardian. Yo nunca los había escuchado. Recuerdo que vi el CD, recién llegado a la tienda de discos, y me llamó muchísimo la atención su portada. Así que no pude resistir la tentación y me lo compré. Aunque, he de reconocer que con las primeras escuchas no me gustó nada. Era muy diferente a todo lo que había escuchado hasta entonces. Sin embargo, después me encantó.

Yo diría que es un álbum único, a caballo entre sus anteriores trabajos de corte más power y los discos que le siguieron con una línea más progresiva y sinfónica. Para mí supuso un golpe encima de la mesa. Un trabajo original y diferente. La estructura de las composiciones, la ambientación, las armonías, la forma de trabajar las voces… una pasada. Probablemente su mejor obra.

A raíz del «Imaginations» me hice fan de la banda y fui comprando uno por uno todos sus discos. Influyeron de una manera notable en mi forma de plantear las composiciones para mi banda. De hecho, en los dos últimos álbumes de Arenia, hay algunos guiños y reminiscencias claras a esa época de Blind Guardian que me encanta. Y como curiosidad, por aquel entonces yo me encargaba de la voz solista en «Atlas» (el germen de lo que después fue Arenia) y aprendí a cantar con la voz rasgada a base de imitar a Hansi, aunque no muy bien, jajaja. De hecho, hacíamos algunos covers de «The Bard’s Song» y de «Bright Eyes». Y no éramos los únicos. Era frecuente ver bandas locales haciendo versiones de los bardos. Creo que su influencia en la escena es innegable.

En mi opinión es su mejor álbum. El más completo y en el que mejor funcionan todos los elementos. Es verdad que el «Somewhere Far Beyond» también es un discazo y le sigue de cerca. De hecho en algún momento de mi vida llegó a gustarme más. Pero el «Imaginations» es más redondo y más inspirado. Y además supuso el despuntar del grupo. Yo creo que fue a raíz de este disco cuando se convirtieron en una banda «grande».

Era la época en la que los discos se escuchaban con mucha más atención. Te comprabas uno de vez en cuando y algún otro que te dejaban. Eran tesoros a los que les sacabas todo el jugo después de infinitas escuchas. Además, de aquella el power comenzaba a pegar fuerte en Europa y tuve la oportunidad de ver a Blind Guardian un par de veces en vivo y disfrutar como un enano con sus temas. Por cierto, con la sala a reventar. Si tuviese que poner un adjetivo a aquellos tiempos sería «gloriosos». Probablemente arrancaba la época dorada de los grupos herederos del power que empezaron a sacar discazo tras discazo. Me vienen a la cabeza además de Blind Guardian, Gamma Ray, Stratovarius, los «nuevos» Helloween con Deris, Running Wild, Iced Earth, Angra, Rage… la mayor parte de los discos «clásicos» de las grandes bandas del género se gestaron en aquel periodo o en los años posteriores. Grandes recuerdos!!


José Gómez-Sellés (teclista de Nocturnia)

Para mí conocer Blind Guardian fue conocer el heavy metal. Tendría unos 14 o 15 años y estaba en un viaje con el instituto. Aunque ya escuchaba algo de rock en español, tenía mucha curiosidad de descubrir qué era eso que tanto atronaba. En uno de los ratos que nos dejaban para dar una vuelta, fui a una tienda de discos y me guié por la portada. Era una época que estaba fascinado por el mundo de Tolkien y esa guitarra con forma de dragón me lo pedía a gritos. El resto es historia. También me compré uno de testament con una parca en la portada pero digamos que no estaba preparado para ellos.

Es un disco que lo tiene todo. Desde partes desgarradoras hasta las más tiernas. Tiene mucho de disco conceptual que junta mil historias que se entrelazan y que con cada escucha se descubren nuevos detalles. La epicidad está por todas partes con coros que evocan otras épocas, que al final es un poco lo que siempre ha buscado el power metal. Sin duda sería un disco que le daría a cualquiera que quiera entender este estilo.

Ya tocaba el piano cuando les descubrí. Me influyeron, con otros grupos de la escena, tanto que decidí intentar hacer este tipo de música soñando con un día tocar con grupos de su nivel. En cuanto a sonido también han sido referente. La producción es un ejemplo a seguir. En el lado no tan positivo también enseñan una gran lección: si has encontrado tu estilo, intenta seguir ahí. Los experimentos, con gaseosa…

Para mí fue la preparación del Nightfall. Igual es muy «mainstream» pero ese disco ya me mató. Ahora con el tiempo quizá sí me quedaría con el Imaginations, creo que es el más completo de principio a fin. Deja mucho que descubrir cada vez y cuando vuelves lo recuerdas con una sonrisa.

Este disco me devuelve a mi adolescencia. Es algo muy bonito. Peleando con los amigos a ver quién era el más heavy o llevaba las pintas más chungas. Pero con ese toque que le daba como de «cultura» en general. Contaban historias reales o de cuentos que querías devorar e inspiraban para querer hacer lo mismo. Las letras de «The script for muy requiem» y «Another holy war» despertaban la vena reivindicativa… Fiestas cantando a voz en grito sus canciones, aprendiendo las letras, dándole el casco del discman a un amigo… ¡Ay, qué recuerdos! No sé vosotros pero me lo estoy escuchando ahora y se me ponen los pelos de punta.


Paco Jiménez (locutor de La Hora del Rock)

Los conocí hace tiempo ya de hecho casi de sus orígenes, si no me equivoco, en su trabajo Batallions of Fear. Yo ya que hacía ya radio y los puse en formato vinilo. Su forma de ejecutar los temas me sorprendió mucho.

El Imaginations es su perfecta obra maestra, power metal de calidad y unas guitarras potentes en todos sus temas. Brillan ante todo una producción excelente, y sí, es un disco perfecto muy tener en cuenta dentro de este estilo. Funcionó muy bien en los 90’s.

Yo llevo media vida metido en esto de la comunicación y estos alemanes siempre tienen cabida tanto en la radio como en mis gustos musicales. Reconozco que perdí su rastro un poco desde su trabajo Beyond in the Red Mirror pues tanto Señor de los añillos y demás ya me estaba hartando un poco. Pero siempre Blind Guardian están en mi top en lo referente al power metal.

Sin duda Imaginations from the Other Side es un antes y un después, se les dio a conocer en todo el mundo, y, sobre todo en España, era el grupo favorito de los adolescentes y de los no tanto adolescentes. La voz de Hansi es demoledora en el disco y la portada es sobresaliente… vamos, es si sin duda lo mejor que han grabado los alemanes. Supieron hacerlo en un momento concreto y se aprovecharon del tirón y de este sonido… ¡y si, es un discazo!

Bufff, recuerdos muchísimos, por ejemplo, mi programa que yo cree y que continua: El Octavo Día de Radio Cornellá, una novieta que tuve que era mega fan del grupo y se llamaba Pilar. Y sobre todo me acuerdo cuando yo era el DJ residente de la sala Mephisto (ahora llamada Boveda) y pinchar la canción “I´m alive”. Eso me pone las pilas…. ¡grandes recuerdos!


Toni López (locutor de El Octavo Día de Ràdio Cornellà)

Conocí a Blind Guardian como se conocía a bandas «menores» a finales de los 80. Alguien metió «Valhalla» como relleno en una cassette donde me grabó un disco de Running Wild. Por entonces, el intercambio de estas cassettes era una forma magnífica para descubrir nuevos grupos, te carteabas con gente de todas partes e intercambiabas conocimientos; los otros métodos eran las revistas, donde te tenías que imaginar como sonaban por las palabras del redactor, y las radios especializadas, donde sí escuchabas la música, pero también tenías que fiarte bastante del criterio del locutor.

Como digo, «Valhalla» me impactó mucho, así que le pedí el disco completo a mi amigo postal, y como respuesta recibí una TDK de 90 minutos con Follow the Blind por una cara y Battalions of Fear por la otra. La reventé. Por entonces, lo que ahora llamamos power metal solo se aplicaba a grupos americanos con un heavy algo más potente; esto era «metal alemán». Y ahí cabía Rage, Running Wild, Scanner, Heaven’s gate… y por supuesto, Blind Guardian.

Sus dos siguientes discos no solo superaron a los dos primeros, les convirtieron en una de mis bandas favoritas; Tales From the Twilight World fue comprado en vinilo con mis precarios ahorros de adolescente, y Somewhere Far Beyond dos años después, en cassette. Ambos pinchados hasta la saciedad. Eso sí, el metal seguía creciendo, los horizontes musicales se ampliaban; en los 90 crecería mi pasión por el metal extremo, por el progresivo, pero lejos de abandonar a mis grupos, solo iba añadiendo más y más; como sigo haciendo, vaya.

Es en ese momento cuando llega Imaginations From the Other Side. Mi primer contacto con el disco en esta ocasión fue a través de la radio. A Mariano García, legendario presentador de DiscoCross, que en paz descanse, le llegó el disco, ya CD, y tras escucharlo, decidió que debía pinchar «Another holy war». Shock brutal mientras escuchaba esa canción por primera vez. Sobra decir que el día de publicación del disco me fui a la calle Tallers de Barcelona a comprarlo. Y sí, lo habían conseguido.

Imaginations empieza con el tema título, que sin ser de mis favoritas, es un gran inicio, con toda la esencia, ese sonido particular de Blind Guardian que les hace tan reconocibles, y esa letra que habla sobre la literatura fantástica, algo que en esa época me tenía bastante enganchado también, en particular el universo Tolkien. Todos los ingredientes estaban ahí. I’m alive le sucede, un tema potente y melódico, magistral; a past and future secret es un tema que a mi personalmente me cortaba el rollo, no fue hasta verla en directo cuando aprendí a apreciarla; pero es que a partir de aquí… «The Script for my Requiem», ¡quÉ canción! es épica, tiene un estribillo majestuoso, cambios de ritmo, velocidad, melodía… una de sus mejores composiciones sin duda; y para colmo, le sucede «Mordred’s Song», otra pequeña obra de arte, la estructura del tema, que nace sobre una base acústica que acaba explotando y dando paso a una composición absolutamente intensa es magistral. Y como todos en este disco, otro estribillo memorable. «Born in a Mourning Hall» y «Bright Eyes» mantienen ese sello característico y esas melodías, manteniendo un nivel altísimo, que corona «Another Holy War», que aún hoy me sigue pareciendo un himno atemporal. Y la historia acaba, And the story ends cierra el disco cargada de épica y melodía. Un cierre redondo a uno de los mejores discos de eso que llamábamos «metal alemán» y acabó convirtiéndose en power metal.

Para mi, este es el último gran disco de Blind Guardian. Un disco de 10. Posteriormente Nightfall les llevó a un montón de nuevos fans, con singles como «Mirror, Mirror», pero, pese a tener temas muy destacables y reconocibles, peca de largo, y de todas esas intros que ya dejan entrever esa deriva hacia trabajos más cargados de matices, pero donde las canciones pierden protagonismo. Imaginations para mi fue el último flechazo absoluto con Blind Guardian, y aunque siguen teniendo destellos y me siguen interesando sus lanzamientos, para mi, ya no ha vuelto la magia que tenían hasta este disco. Un disco imprescindible.

El detalle curioso de este álbum lo encontramos en los créditos; era la época de proclamar «No keyboards on this album». La reafirmación del heavy metal a través de la negación de ese instrumento. Y claro, seguramente no fue un teclado, pero escuchando como empieza The script for my requiem, entre muchos otros detalles del disco, tan true heavy metal no sería. Que dirían ahora, que acaban de editar un disco que es «no guitars on this album»… Sea como fuere, la trilogía (que no es tal salvo por su cronología) Tales/Somewhere/Imaginations es para mi fundamental en la cultura metalera de su época, y debería estudiarse en los colegios en lugar de tanta flauta dulce.


Abel Marín (redactor de Science of Noise)

Buff… Regresión al pasado, la imagen comienza a hacer aguas y se vuelve borrosa para aparecer a principios de los 90 en los que ya el acné afortunadamente había desaparecido. Allí estoy yo, 25 años más joven y absorbiendo todo el metal que, mis aún poco resentidos oídos, podían asimilar en aquel walkman -nunca tuve discman– que tantas horas de compañía me ha dado.

Llegué a Blind Guardian, como la mayoría, por casualidad y siempre gracias a los colegas del instituto. En concreto y especialmente a mis colegas Garci y Ángel (tíos, os debo mucho). A través del primero conocimos bandas como la que nos ocupa o los grandiosos Running Wild. Pero en casa de mi amigo ÁngelCuenca!, un abrazo) nos empapamos del poder de los germanos, en una época en la que la literatura de J.R.R. Tolkien ya nos había conquistado y los medios de comunicación nos marcaban como asesinos en potencia gracias a los juegos de rol. Adentrarnos en la extensa discografía de bandas sonoras y heavy metal de la que disponía supuso encontrar auténticas maravillas.

Los primeros discos a los que tuve acceso fueron los de su primigenia etapa, Battallions of Fear (1988) y Follow the Blind (1989), auténticos trallazos speed metal y ramalazos thrash que tenía grabados en ambas caras de una cinta de 90, con el logo concienzudamente dibujado a mano.

Más tarde, las maravillosas portadas sobre pasajes del Señor de los Anillos, obra del idolatrado y omnipresente Andreas Marschall, nos engancharon en la obra de los alemanes.

Durante el obligado servicio militar (¿Por qué no pedí una prórroga más?) su discografía me acompañó en los ratos libres, consiguiendo enganchar a alguno de mis compañeros de camareta.

En definitiva, para no enrollarme más, en aquella época nos guiábamos por el instinto y las portadas. Así que, podemos decir que gracias al instinto de mis amigos de entonces y a las magníficas portadas -a partir del tercer disco, eso sí- llegamos a dar con los bardos.

Imaginations fue la explosión de la de la pomposidad musical, al menos de lo que yo conocía. Stratovarius nos proporcionaba una delicadeza en los solos y las melodías acercándonos a la música clásica, aunque ya habíamos tenido contacto con el neoclasicismo de Yngwie, pero la grandilocuencia y el peso de Blind Guardian, en aquel momento, fue algo nuevo para muchos de nosotros. El hecho de proceder de un estilo más sucio y directo, la transformación musical manteniendo la esencia de sus primeros discos, supuso que estuvieran por encima de muchas bandas contemporáneas y clónicas, algunas incluso malas copias.

Musical y periodísticamente me han influido poco, pues por desgracia no puedo considerarme así, ya que no sé tocar ningún instrumento (espero que de momento) y no realicé carrera periodística, no soy más que un apasionado seguidor.

¿En la escena? Como espectador puedo decir que bastante, sólo había que ver la cantidad de camisetas que se veían entonces y que aún perduran por las salas de conciertos.

En lo que a nuevas bandas se refiere, salieron tantos clones que quisieron darle una vuelta más al estilo,  que acabó por saturar la oferta con demasiadas bandas prescindibles.

Para mí el disco definitivo de la banda fue Nightfall in Middle Earth (1998) porque fue el último que escuché entero, jajaja. Ya no he conseguido escuchar un disco completo de Blind Guardian posterior a ese disco a excepción del Live (2003), pero no más de un par de ocasiones.

Sinceramente creo que hubo un punto de inflexión anterior y fue con la edición del Tokyo Tales (1993), me explico. Siempre suele decirse que tras la edición de un disco en directo hay una nueva etapa posterior. En mi opinión, es la barrera que rompió con el sonido clásico de la banda que ya había evolucionado a partir del Tales From the Twilight World (1990) y que con el Imaginations ya acabó de explotar.

Como explicaba al principio, la salida del Imaginations fue una explosión a nivel personal y mayor conocimiento de la escena power representando una regeneración del estilo más clásico del metal.

Tras llevar unos años empapándome del metal más clásico, también fue mi ruptura -por suerte, temporal- con ellos. Como ya se sabe, Dickinson, Halford, Kiske abandonaron las bandas que eran pilares en mí y, que a pesar de continuar sacando discos correctos, en algún caso, la influencia de otros estilos en el metal supuso un soplo de aire fresco en una escena que parecía que no sabía adaptarse a los nuevos tiempos. Fueron años en los que entré en contacto con el death, el black más comercial, el industrial y a pesar de no reconocerlo, el grunge y el nu metal. Así que ese popurrí consiguió salvar una escena algo estancada en los grandes nombres clásicos que ahora empezaban a resquebrajarse por culpa de decisiones o publicaciones bastante polémicas.

Echando la vista atrás, y leyendo las retrospectivas de Science of noise, uno es más consciente que a pesar de lo que se decía entonces, todo el metal de entonces no sirvió más que para enriquecer la escena. Es cierto, y vuelvo a repetir, que fueron años duros para los más clásicos, época de cambios de formación y de estilo en algunos casos que a día de hoy son imperdonables, pero que dio lugar a conocer nuevas bandas y discos imprescindibles a día de hoy.

Soy un sentimental y un paco para muchos de los que me conocen, pues me hubiera gustado vivir el momento álgido del heavy en los 80, pero puedo decir con orgullo que me dejé influenciar por todo el metal que se respiraba en la década de los noventa, sin perder de vista a los clásicos.


Javier Nula (guitarrista de Opera Magna)

Recuerdo que un amigo me dejó un cassette (sí, soy viejo, ¿vale?) de Helloween y resulta que por el otro lado de la cinta estaba The Forgotten Tales de Blind Guardian. Cuando acabó el disco de Helloween le di la vuelta a la cinta, escuché dos temas, y no me gustaron nada (el disco empezaba con una versión de Mr. Sandman y otra de Surfing USA). Así que sólo me grabé el disco de Helloween. No fue hasta unos años más tarde que les di otra oportunidad después de que otro amigo se comprara precisamente el Imaginations from the Other Side y me insistiera en que tenía que escucharlo. Y flipé cuando lo escuché. De ahí en adelante empezamos a comprarnos y dejarnos todos los CDs anteriores.

Yo diría que es un power muy cañero y bastante original dentro del estilo. Algunos de sus temas tienen partes más cercanas al heavy metal que al power metal como tal. Además, compositivamente es un disco muy complejo pero, a la vez, muy bien elaborado y construido. Es una de las cosas que más me gustan de Blind Guardian, en general, y esto se empieza a acentuar más a partir de este disco: es un grupo que busca la complejidad compositiva (sin caer en vanguardismos ni excesos) por encima de la complejidad de ejecución. Muchos grupos y músicos de distintos subestilos del heavy tratan de destacar haciendo cosas más difíciles de tocar que otros. Ellos no. Ellos hacen canciones más complejas de componer que otros. Es relativamente fácil tocar sus canciones (al menos con la guitarra), pero es casi imposible componer canciones como las que ellos componen.

Quizá me hayan influido más como oyente que como guitarrista, pero sí que me hicieron apreciar otro tipo de sonoridades y también me enseñaron que la música no puede ser una competición por ver quién hace los solos más difíciles sino que se trata simplemente de tratar de hacer buenas canciones que transmitan algo.

Yo creo que fue un punto de inflexión en su carrera. Me da la impresión de que con este disco hicieron «click» y pensaron «este es nuestro camino, nuestra seña de identidad». Pero personalmente creo que eso lo acabaron de lograr en su siguiente disco: Nightfall in Middle-Earth. Para mí ese es su disco definitivo. Pero necesitaban un Imaginations…antes de llegar a ese punto. Y, desde luego, es un discazo increíble.

Fue la época en la que yo estaba empezando a escuchar cada vez más power metal, también estábamos componiendo el primer disco de Opera Magna y yo estaba más y más obsesionado por momentos con tocar la guitarra más y mejor. Sin duda este disco fue uno de los principales culpables del auge del power metal y de que tantos músicos de la época decidiésemos decantarnos por ese estilo en concreto.


Martí Paéz (vocalista de Forja)

Se podría decir que Blind Guardian es mi grupo favorito, o más bien el grupo que más me ha influenciado. Creo que tanto en mi manera de cantar como en el apartado musical de Forja es algo que se ve reflejado de una manera u otra.

Descubrí al grupo en mi adolescencia, no sabría decir con que canción, posiblemente los conocí con «Mirror Mirror» que era el tema insignia de la banda por aquel entonces, tanto me impactaron que llegué a aprenderme lo que decía Hansi entre canción y canción en el «Live».

A posteriori, me empapé bastante de la discografía de los alemanes, y para el caso que nos atañe que es «Imaginations from the other side», sin dudarlo para mí es el mejor. Si me pongo a analizar a la banda, podría decir que hay unos Blind Guardian de antes y después de este disco, los primeros que hacían un power speed metal en una onda muy parecida a Helloween en el «Walls of Jericho» a ser el gran referente del power sinfónico que son hoy en día. Imaginations From the Other Side fue la transición entre lo viejo y lo nuevo, no fue un cambio repentino; No es para nada lo mismo el Battalions of Fear que el Somewhere far Beyond como tampoco es lo mismo Nighfall in the Middle Earth y Beyond the Red Mirror, pero si que es un punto de inflexión (que algo se podía ver en el Somewhere). Aparte, no me sobra ningún tema, todos los encuentro geniales.

No creo que sea un disco que haya influenciado la escena de por si, al menos no directamente, creo que a la hora de coger Blind Guardian como referencia es más el sonido Nigthfall (posterior) o el del Follow the Blind (anterior). Creo que es un disco que tiene más valor para el grupo y sus fans que no para el fan medio de power metal, aquí ya tendríamos que entrar en un análisis del power metal y sus vertientes (entre ellas el «power paco») que al menos hoy, no me quiero meter 🙂


John Portillo (guitarrista de Kilmara)

Pues eran mediados de los noventa y eran años difíciles para el metal, pero de la noche a la mañana se empezaban a ver camisetas de Blind Guardian por  todas partes, al principio no me molesté en descubrirlos y no fue hasta un año después de la publicación de Imaginations cuando escuche su archiconocido «The forgotten Tales» cuando me dejaron alucinado y con la piel de gallina escuchando «Bright Eyes» y en especial the «Bard´s Song» cantada prácticamente por todo el público, alucinante, aún se me ponen los pelos como escarpias.Así que ahí fue cuando empecé a interesarme por la banda Teutona.

Posiblemente en el tiempo que escuchaba Imaginations no lo asociaba tanto al power metal, me parecía y me sigue pareciendo una mezcla de speed, thrash, epic y folk, sin duda un estilo muy particular tanto por la manera de cantar como por las reconocibles armonías de guitarra .

Reconozco que aunque tengo tres o cuatro discos de ellos no son una influencia para mí. Con los años se volvieron sobrecargados y posiblemente lo que más me guste de ellos son sus partes más acústicas. Tampoco considero a André Olbrich un gran guitarrista por lo que no me ha influenciado para evolucionar en mi instrumento.

Considero que es su album definitivo porque después de ese disco nunca más me volvieron a interesar,compre algunos discos anteriores como Somewhere Far Beyond  pero tenían una producción horrible. Me compré a night in the opera y considero que tiré mi dinero. A posteriori nunca más volví a gastar mi dinero en ellos ni los vi en directo. No me llamaba nada la atención una banda que cantaba sobre Elfos y Mordor pero no creaban ninguna atmósfera inmersiva en su directo saliendo a tocar en bermudas como si fueran los Anthrax o los Ugly Kid Joe (ambas bandas que sí he visto en directo y me encantan). no se, se me hacía raro.

Posiblemente mis mejores recuerdos sean de aquella época, los 90, ya que en los 80 aún era muy joven y me inicie en la música con mis primeras bandas en los 90, al respecto de los Blind Guardian y aquella época, recuerdo que una banda de amigos míos abrieron uno de sus mejores conciertos en la Zeleste de Barcelona, no se si alguien recuerda a Karne de Zerdo una banda de «grindcore cochino» que en aquellos entonces eran la envidia de todos los músicos de mi pueblo y a los que les envío desde aquí si me están leyendo un abrazo.


Xavi Prat (redactor de Science of Noise)

Conocí a Blind Guardian, precisamente, cuando sacaron el Imaginations from the Other Side, hace un cuarto de siglo. Por aquél entonces, aunque los jovenzuelos no interioricen, no existía internet, y la forma de conocer nuevas bandas era trapicheando con amigos, pasando largos ratos en tiendas de música (que iban poniendo novedades, como en la mítica Arise de la calle Tallers barcelonesa) o leyendo revistas, como la Kerrang! o la HeavyRock. Alguna de estas leía yo cuando vi que unos alemanes sacaban disco nuevo. Recuerdo la frase «los de Hansi están en su mejor momento, y recuerdo ver una portada que me encantó, ya que por aquél entonces estaba muy enganchado a la literatura fantástica. A la que pude fui a una tienda y, a sin haber escuchado nada antes, que es como se hacían las cosas, compré el disco y todo a mi alrededor estalló. En muy poco tiempo se convirtieron en uno de mis grupos preferidos y, el disco, en uno de mis grandes baluartes. Hoy, 25 años después, apenas escucho el disco o el grupo (por alguna razón, ha envejecido malo, o quizá he sido yo el que se ha echo un viejo carcamal), pero negar  el impacto de grupo y disco es de ser muy tonto, y yo solo lo soy un poco. A nivel personal tienen un cierto punto nostálgico conmigo. Al día siguiente de verles, en octubre de 2006 (su último concierto al que he ido), recorrí más de 600 km para empezar una nueva vida en otro sitio, así que el grupo siempre irá ligado a cambios que he vivido en primera persona.

Aquello era power pero solo a medias. No es lo que hacía Helloween, aunque tenía semejanzas (obviamente, como otros grupos no power). El doble bombo y la melodía eran parte esencial de su música, pero la alegría daba paso a la épica. Creo que el disco implicó una nueva forma de entender el estilo, trajo un poco de aire fresco e innovación a una manera de entender el metal que, en pocos años, necesitaría refrescarse. Si le añadimos la trayectoria que tendrían a posteriori, opino que Imaginations from the Other Side es uno de los discos más importantes del power, más allá de gustos personales de cada uno. Una nueva oleada de grupos beberían más de ellos que de los padres calabaceros, y una nueva forma de cantar, incluso de timbre de voz, se haría un hueco entre tanto agudo.

Imaginations from the Other Side marca un antes y un después en la carrera de los alemanes. El mismísimo Kai Hansen así lo dijo, desligándoles de lo que suponía el power. Venían ya con unos cuantos discos bajo el brazo, algunos muy buenos, pero fue con este con el que rompieron todos los moldes. A mí, personalmente, es el que más me gusta (diría que de lejos), pero es que su evolución posterior no se entiende sin este disco. La orquestación actual (excesivas, para mi) tienen su germen en los arreglos y composiciones que pueden representar temas como la homónima al disco, «The Script for my Requiem» o «Bright Eyes», seguramente las tres que más me gustan del disco, seguidas de cerca por «Another Holy War». Mucha gente se decanta por el Nightfall in Middle-Earth, incluso el propio Hansi nos dijo que para él ese era EL DISCO de su carrera, pero es inimaginable sin nuestro protagonista. Para mi gusto, disco pivotal en la discografía de Blind Guardian.

25 años después la cosa ha cambiado, claro. Me veo a mí mismo con un cuarto de siglo menos y me recuerdo en el instituto, con Thomen Stauch como batería de cabecera, adorando la velocidad y la melodía en la música (esto no ha cambiado demasiado, solo un poco). Recuerdo qué era ir descubriendo cosas dentro de metal, y con la sangre caliente de la juventud, lo especial que eso te creía hacer (y que, obviamente, era una papanata). El power reinó durante una época, una época muy flojita para la familia metalera, y aunque hoy es defenestrado por propios y extraños, yo sigo estando muy contento de que me pillase en plena juventud. El power en general, y Blind Guardian (con otro par de grupos) en particular, son parte imprescindible de mi esencia y mi persona, aunque nunca haya jugado a rol 🙂


Jordi Ruiz (director de Pick Prods)

Blind Guardian fue uno de los primeros grupos con los que empecé en esto del metal… Lo recuerdo perfectamente, los escuché por primera vez en una tienda de discos que ya no existe Music World, si mal no recuerdo, en la Ronda de Sant Antoni, cerca del mercado. Entré para curiosear, pues estaba yo en esa primera época de descubrimiento de bandas (conocía a Maiden, Megadeth, Bon Jovi, y poco más…), y estaba sonando “Imaginations…”, lo acababan de editar. Había leído sobre la banda en revistas, pero nunca les había escuchado. Me moló mucho, pregunté que era, y me llevé el CD a casa, ¡sin pensarlo! La increíble portada de Marschall, supongo que también ayudó mucho a decidirme…

En mi opinión, Imaginations from the Other Side es uno de los puntales del power metal. Equilibrio perfecto entre temas cañeros, acústicos o semi-acústicos, logrando un alto nivel de epicidad, y destacaría, sobre todo, la inmensa labor del batería Thomen Stauch. Orquestación justa y necesaria (no como en sus posteriores discos, que han ido perdiendo el norte con el paso de los años, donde se pierde el metal entre tanta orquestación y arreglos innecesarios…). Al ser una de mis primeras bandas, marcaron mucho mi “camino” dentro del rollo… Aunque poco después conocí a Gamma Ray y dejarían de ser mis “estandartes”. Tampoco ayudaron mucho con sus siguientes trabajos, que no me gustaron tanto como Imaginations… Por suerte, los pude ver en directo antes de que Hansi se descolgara el bajo, en mi opinión, perdieron mucha puesta en escena con esta decisión. Hansi no es un gran frontman. Actualmente, les sigo teniendo mucho respeto y admiración, pero me siento un poco decepcionado al ver que no consiguen devolverme la ilusión que me transmitieron con este disco.

Es cierto que para muchos fans su disco cumbre es el siguiente Nightfall in Middle Earth, e incluso estarán los mas puretas que preferirán sus primeros discos (¡también muy buenos!) pero no lograron engancharme tanto. Sigue siendo un gran disco, pero para mi, no hay otro igual a Imaginations… Imagínate, ¡mis primeros años escuchando metal! Sin Youtube ni Spotify ni Internet, prácticamente… Comprando revistas y dejándote guiar por sus críticas, colegas, tiendas de discos… También Blind Guardian fueron la primera banda a la que fui a buscar antes de su concierto en Zeleste, ¡para hacerme fotos y conseguir sus autógrafos! Mas tarde llegaría la afición por las púas… ¡jajajaja!


Yolanda Sabater (redactora de MaxMetal)

Recuerdo que a los 14 años un amigo me pasó varios discos de Helloween, a día de hoy siguen siendo una de mis bandas favoritas y creo que eso hizo que me declinara por el power metal, género que sigue siendo mi predilecto. No recuerdo exactamente el momento en que conocí a Blind Guardian, quizá algún vídeo en YouTube meses más tarde, pero lo cierto es que me parece la transición natural desde Helloween. Son unos dignos sucesores del legado del power metal alemán.

Con sus discos anteriores ya apuntaban maneras, ya se posicionaban como una de las bandas del momento, pero sin duda este disco les proyectó a lo más alto. Imaginations of the other side, marcó el inicio de la época dorada de Blind Guardian y no sólo en el power metal, pues este disco tenía también mucho toques de puro heavy metal. No me extraña que se considere EL DISCO de Blind Guardian.

Blind Guardian han conseguido crear verdaderas obras de arte a lo largo de su carrera. Tienen un gusto por la música excepcional y cuidan muchos detalles que la música clásica en su día fundamentó. Las armonías, el contrapunto además de cómo lo enlazan con mitología, fantasía, es la combinación perfecta. Como espectadora, he podido verles en dos ocasiones, y guardo su actuación en el Leyendas del Rock 2017 como uno de los conciertos más especiales de mi vida.

El haber conocido la banda a posteriori de los lanzamientos de sus discos más importantes, estos cayeron en mis manos a la vez, así que no podría decantarme por uno sólo. Lo que sí es cierto que mis discos predilectos, son el Imaginations y “Nightfall in the Middle-Earth” curiosamente el posterior al lanzamiento del primero. ¿Casualidad? No lo creo.

Por suerte o por desgracia pertenezco a la generación Z, así que ni había nacido cuando se publicó. Lo que sí sé es que he tenido la oportunidad de entrevistar a Hansi en persona y asistir a dos conciertos de Blind Guardian y siguen manteniendo a sus seguidores y mueven masas allá donde van, así que sin duda los 90 tuvieron que ser incluso mejor.


Victor «Torr» Senovilla (fundador de Metalovision)

Conocí a Blind Guardian en la época de instituto por el clásico amigo que te nutría de discos. Primero me enseñó Hammerfall y Rhapsody y un día ya me dijo «estás preparado para esto, es mi banda favorita de todos los tiempos: Blind Guardian» y casualmente su disco favorito, en aquel momento era «Imaginations from the Other Side». Dentro del Power Blind Guardian siempre ha marcado una línea y una gran influencia, desde su imagen en los discos, al sonido como incluso la sobriedad de las puestas en escena. Y el Imaginations from the Other Side creo que fue un conjunto de himnos que influyeron a la continuación del género.

Como soy fan de este estilo, en mi han influido mucho, pues ha sido un grupo que me ha ayudado en momentos de inspiración, por la capacidad que tienen de teletransportarte a otros ambientes. Y a la escena yo creo que igual. Te puede gustar más o menos el Power pero se tiene mucho respeto a Blind Guardian y a su música. No soy fan del término «disco definitivo», porque aunque para mi sea un discazo, para otra persona puede serlo otro. Cuando se habla de música y arte entra la subjetividad de los gustos. Para mi era un época en la que había un gran auge del Power Metal. Grandes giras y discos surgieron durante aquellos años.


Carles Soler (guitarrista de Forja y Haunted Gods)

Conocer a Blind Guardian fue una experiencia curiosa, corría el año 2003 o 2004 y yo tendría unos 14 años. En aquella época justo me había empezado a interesar el mundo del metal y me había fijado en que era habitual ver a gente con camisetas de Blind Guardian.

Decidido a darles una oportunidad atraído por el artwork de las camisetas que me recordaba infinitamente a la literatura fantástica a la que tanto me había enganchado, traté de encontrarlos por internet antes de lanzarme a comprar alguno de sus discos. Cual fue mi sorpresa (en aquella época YouTube funcionada de aquella manera, y ni hablar de Spotify. Suerte tenías si conseguías dar con algún blog piratilla que tuviera justo lo que andabas buscando) cuando solo pude encontrar su disco de versiones. No lo entendí, no estaba mal, pero no justificaba la masa de gente que yo había visto llevando sus camisetas. Lo dejé estar por un tiempo, unos pocos meses mientras me duró aquella decepción inicial, hasta que por fin volví a la carga (me llamaban demasiado la atención) y entonces sí conseguí dar con un disco original. No recuerdo bien qué CD fue el primero, mi memoria me dice que fue el Nightfall in the Middle Earth (lo cual es probable si consideramos el éxito que tenía “Mirror Mirror” en aquél entonces, pero es probable que no fuera así, quién sabe). Lo que puedo decir es que me encantaron, me enamoré de aquél sonido, y cuando sacaron A Twist in the Myth a finales de 2006 yo lo esperaba con ansia.

Imaginations from the Other Side supone un primer punto de inflexión en el sonido de la banda hacia un sonido más orquestal, más complejo, que poco a poco irá ganando terreno con cada nueva entrega de la banda. Dentro del Power Metal no tendría miedo a decir que supone uno de los pilares del género, tanto por su propia importancia como por la época en la que salió. De 1995 a 2000 se publicaron los discos más potentes/influyentes del género que consolidaron a las grandes bandas que todos tenemos en mente cuando pensamos en el estilo: Empezando por el mismo Imaginations From the Other Side (Blind Guardian, 1995), y otros como Glory to the Brave (Hammerfall, 1997), Visions (Stratovarius, 1997), Land of the Free (Gamma Ray, 1995), Symphony of the Enchanted Lands (Rhapsody, 1998), The Fourth Legacy (Kamelot, 1999), Ecliptica (Sonata Arctica, 1999), The Divine Wings of Tragedy (Symphony X, 1997), Holy Land (Angra, 1996) y muchos otros. Incluso a nivel nacional podemos contar con los discos Legendario (Tierra Santa, 1999), La Llama Eterna (Avalanch, 1997) o Shadowland (Dark Moor, 1999).

El sonido de Blind Guardian siempre ha sido muy característico y difícil de imitar sin que se notara. No son pocas las bandas que salieron a principios de los 2000 que nos recordaban al Power Melódico de Stratovarius, o a cualquiera de las otras bandas. No obstante, incluso hoy en día, es complicado encontrar a otra banda que suene a Blind Guardian. No sólo eso, sino que los alemanes tal vez hayan conseguido crear uno de los grupos de power metal más transversales siendo de los pocos del estilo que han conseguido llegar al público metalero más diverso en mi opinión. A pesar de de ello, o tal vez por la misma razón que cualquier otro, Blind Guardian ha ejercido en mí una poderosa atracción desde que me rendí a su sonido, pero no ha llegado a influenciar de forma directa las composiciones de mi banda.

No sé si diría que se trata de su disco definitivo. Blind Guardian se caracterizan por ofrecer una versión mejorada (o por lo menos distinta) de sí mismos en cada disco haciendo de cada uno de ellos un universo particular y único. Siempre encontramos el hilo conductor de una sonoridad inconfundible, pero siempre podemos contar con que habrá sorpresas, nuevos elementos y curiosidades… Con una discografía y trayectoria como la suya nunca sabemos cuál puede ser su disco definitivo, pero Imaginations From the Other Side es un pilar para muchos y junto con Nighfall in the Middle Earth posiblemente constituya el eje del sonido “clásico” de la banda.

Desgraciadamente en aquella época yo era demasiado joven (tenía solo cinco años). No fue hasta más tarde que llegué al mundo del metal, hacia 2004 – 05, precisamente cuando mi género favorito, el power metal, empezaba a decaer o, cuanto menos, a pasar de modo entre el público metalero general. No obstante, el sonido del power metal de la segunda mitad de los 90 y principios de los 2000 siempre ha ejercido una poderosa atracción en mí. Aunque no crecí con ese sonido, sí que fue el que me atrajo al metal y conservo un gran afecto por él.


Mario Suárez (guitarrista de Zenobia)

Creo que conocí a Blind Guardian con el Battalions of Fear. Yo ya era un friki del Señor de los anillos y de los juegos de rol y alguien trajo a una partida un disco de “un grupo que hablaba de temas épicos/fantásticos que encima tenía una canción sobre Gandalf!”. Fue mi primer contacto con un grupo de este tipo, para qué quieres más, imagínate un frikazo como yo descubriendo que existía música que trataba estas temáticas…

No sé si los enmarcaría en el puro “power”, para mí power eran Helloween, Stratovarius, Gamma Ray… Lo que sí que hizo Blind Guardian bajo mi punto de vista, fue abrir el género épico y fantástico al gran público del rock y el heavy, así como dar a conocer la obra de uno de los grandes genios literarios del siglo XX: J.R.R. Tolkien.

En mi experiencia personal (o sea, las bandas que yo conocía o escuchaba con 15 añitos…) Blind Guardian formó un grupúsculo junto con Manowar y más tarde Rhapsody que realmente creó una nueva rama dentro del heavy, gracias a la cual, hoy relacionamos los dragones, las batallas, las espadas y sobre todo a Tolkien con el heavy metal

Bueno, parece que ya voy dando a entender que Blind Guardian ha sido una de esas bandas que me tocaron la patata, ¿no? En el disco de despedida de mi vieja banda Red Wine, -“The End”-, un disco de versiones donde cada miembro del grupo eligió una canción sin ningún tipo de cortapisa, mi tema elegido fue “Imaginations from the other side”. Creo que eso lo dice todo. (Recuerdo que fue uno de los que más me costó cantar…)

Cualquiera que haya seguido mi carrera con Red Wine sabrá de mi vertiente friki-tolkieniana, la cual he plasmado en no pocos temas de la banda (Casi nadie sabe que la banda en un principio se llamaba Isengard, nombre al que tuvimos que renunciar porque ya había alguna banda conocida -aunque desconocida para nosotros, claro- con ese nombre). En temas como “Llantos de otra realidad”, o “tras el portal” del disco “Sueños y locura” se puede apreciar una gran influencia de Blind Guardian, tanto en la música como en las letras.

Desde los 11 años más o menos que me adentré en el maravilloso mundo de las historias fantásticas (primero con Tolkien, luego con otras sagas como Dragonlance, Reinos Olvidados, Mundodisco…) y de los juegos de rol, he SIDO un bardo: He viajado a mundos increíbles escuchando a bardos, he vivido aventuras trepidantes acompañado de otros compañeros bardos, y he tocado, cantado y actuado para otros con la misma intención y ánimo que los bardos que ponían mis sentimientos patas arriba.

Muchas de mis letras hablaban de bardos, en otras, yo era el bardo donde contaba una historia, a veces épica,  a veces trágica, pero siempre dejando volar la imaginación.

Imaginations from the other side junto con Night fall in middle earth constituyeron para mí la piedra angular de la fantasía asociada al heavy metal. Aunque muchos coinciden en que el Night fall es un disco más completo, más redondo (y puede que así sea), para mí el Imaginations fue EL disco de Blind Guardian. Fue uno de esos discos que te toca bien adentro, musicalmente y por su mensaje. Cuántas veces me he quedado embobado, con una mezcla de placer, dolor y nostalgia, imaginando estar en esa portada, atravesando el espejo (“Tras el portal” habla precisamente de esto), cogiendo ese laúd y empezando a recorrer esos mundos con una mochila y una espada a la espalda…Joder, todavía se me pone la carne de gallina recordándolo…

Objetivamente, quizá su disco definitivo fue el Nightfall, pero para mí, Imaginations from the other side ha sido y será el más importante de la banda por lo personal. Puedo decir con total rotundidad, que sin Imaginations from the other side, para bien o para mal, yo hoy no sería la persona que soy,

Más o menos ya lo he contado todo, pero os podéis imaginar, un chaval de 16 años cuyas únicas aficiones (y cuando digo únicas, son únicas) eran el heavy metal y tocar la guitarra por un lado, y el rol y la literatura fantástica por otro. Y de repente darte de bruces con Imaginations from the other side. Pues eso, el puto Nirvana.

Partidas de rol interminables, juegos de mesa, borracheras con cánticos en los bares rodeado de mis colegas… también horas en la habitación encerrado con la guitarra sacando las canciones, escribiendo letras, leyendo libros; he sido un friki de puta madre, sí, pero echando la vista atrás he sido MUY feliz durante esos años y gran parte de culpa la tiene Blind Guardian e Imaginations from the other side.

Siempre serán parte imprescindible de mi pasado, de mi Historia –con mayúscula- y eso es lo importante.


Jordi Tàrrega (redactor de Science of Noise)

Era un quinceañero en esos días y estaba obsesionado con Kai Hansen. En esos días todo lo que tocaba Kai se convertía en oro y supe que había colaborado con unos tales Blind Guardian, también alemanes. En un viaje a Andorra compré música barata en CD con mis escasos ahorros y un disco de los Guardian estaba barato: Tokyo Tales. Era un directo espectacular y nada más escuchar “Banish from Sanctuary” me volaron la cabeza. Era justo lo que estaba buscando. En esos días Blind Guardian habían sacado ya el Imaginations y luego ese maravilloso disco de caras B llamado Forgotten Tales. Cada disco era mejor que el anterior y recuerdo que Hansi en esos días tocaba el bajo. Pude verle un par de veces antes de que pasara a ser sólo vocalista.

Dentro de la etiqueta power se juntaron muchas bandas que, vistas con perspectiva, eran muy diferentes, pero el power metal nació como etiqueta necesaria para juntar a toda la nueva ola de metal tradicional, y nos dio muchas alegrías, pues las grandes bandas de heavy metal tradicional estaban casi defenestradas o descabezadas. IFTOS es una de las cimas del estilo y un enorme paso adelante. Junto a los dos Keepers, el Land of the Free de Gamma Ray y el disco que nos ocupa creo que estamos ante la santísima trinidad del estilo. A nivel de composición el disco es una maravilla y es su techo por mucho que haya gente que se debata junto a su posterior obra. Cuando giran los Guardian de festivales siempre dan mucha cancha a esta obra. Nadie compone como esos Blind Guardian, ni ellos mismos pueden ya recrear esa magia.

Los bardos siempre han sido algo superior respecto al resto. Quizá con los años me he dado cuenta de que a nivel periodístico era absurdo comparar las bandas de power metal con ellos pues estaban en otro nivel. Son uno de mis grupo de cabecera y hasta su posterior obra me conozco casi todos sus temas. La influencia es tal que incluso se barajó la posibilidad de que participaran en un tema en la trilogía del Señor de los anillos. Las guitarras hacen solos coreables y Hansi a día de hoy ya goza del estatus de inmenso cantante. Durante lustros fue ninguneado.

Creo que éste es su trabajo definitivo porque el peso de los clásicos es abrumador, variado y hay elementos progresivos, medievales y heavy metal tradicional. Quizá me quede con las baladas y medios tiempos, pero es que hay también allí mucho power metal de factura impecable. Piensa que estamos hablando de una banda que tiene a Queen como sus favoritos y que la canción favorita de Hansi es “Gutter Ballet” de Savatage. Es que coincide con mis gustos a un nivel superlativo. Se nota la base, pero es que ellos abrieron mundos a toda la escena. Quizá deberían haber sacado otro disco similar al IFTOS antes de atacar una bestialidad como fue Nightfall in the Middle Earth. Mas que nada porque allí volvieron a subir a otro nivel compositivo otra vez superlativo. Repetir o superar estas dos obras ya fue imposible.

Los que tuvimos una infancia y juventud feliz fue para nosotros la banda sonora del momento. En esos tiempos las discotecas de metal y los bares eran muy reacios al power metal y hasta 2002 no le dieron cancha más allá de algún DJ que sí entendía los nuevos tiempos. “Speedman” y Paco Jiménez solían poner estos temas en el Mephisto siendo valientes, pero en general, por mucho que pidieras Startovarius, Gamma Ray o el Guardián Ciego te decían que sí… y luego nunca sonaba.


Albert Vila (director de Science of Noise)

Lo cierto es que en circunstancias normales no pintaría yo mucho en un reportaje sobre power metal, y es probable que sea el menos fan del estilo de todos los nombres que me acompañan en este artículo. El power metal no me emocionó cuando estaba de moda a mediados de los noventa ni tampoco lo hace ahora (aunque un concierto del estilo siempre suele ser divertido), y así mismo no me dicen nada bandas como Helloween, Gamma Ray o los propios Blind Guardian. Con decir que la única vez que vi en directo a los bardos, por cierto, fue en el Rock Fest barcelonés de hace dos o tres años plantado frente al escenario de al lado mientras esperaba a que saliera King Diamond (un tío que, para más inri, tampoco me gusta), ya os lo digo todo.

¿Entonces, alma de cántaro, qué leñes haces tú aquí? Pues la verdad es que es curioso, ya que durante esos años en los que básicamente me dediqué a profundizar en todas las vertientes del metal extremo (black, death, doom, grindcore, etc….), también opté por comprarme precisamente el CD del «Imaginations from the Other Side». Sinceramente no tengo ni idea de por qué lo hice, ya que por lo que recuerdo no tenía ninguna cinta previa de Blind Guardian y yo era muy consciente y estaba muy convencido de que el power metal no me gustaba un pelo (a pesar de ser fan muy irredento de los grandes padres – o abuelos, si queréis – del estilo como son Iron Maiden, claro). Quizás es porque a mí alrededor universitario había muchos fans del power, quizás porque la portada molaba mucho (y aún mola mucho), o quizás porque lo encontré de oferta irresistible en alguna tienda, pero el hecho es que llegó a mis manos de una forma u otra.

Y no, si esperáis que os explique cómo el momento de ponerlo en mi reproductor de CDs supuso toda una revelación para mí, podéis esperar sentados. En realidad el CD al completo lo escuché muy pocas veces, y casi siempre que lo puse era para avanzar directamente hacia la canción que siempre me ha flipado de verdad de él, que no es otra que «Bright Eyes». Y es curioso, porque si bien suelo salvar bien pocas cosas del resto del disco (un disco que he escuchado ahora de nuevo y que, más allá de tres o cuatro temas, sigue aburriéndome bastante, lo siento), este tema en concreto me encanta en todos sus matices, tanto sus guitarras como sus grooves como las líneas vocales que culminan en un estribillo épico ante el que no puedo evitar levantar el puño.

La incidencia de Blind Guardian en mi vida y mi formación metálica es verdaderamente mínima, y mi magro conocimiento de la banda no me permite valorar este disco (que creo que es el único que he escuchado en profundidad) en relación con el resto de su carrera. No me parecen horribles para nada, ojo, pero a mí no me dicen nada. Dicho esto, mi respeto y mi reconocimiento a su figura y su influencia es máxima, y es evidente que en su época de máximo apogeo (mediados y finales de los noventa), los alemanes eran uno de los máximos protagonistas en las camisetas de los metaleros. Sus atractivos diseños, su temática relacionada con The Lord of the Rings y otras epopeyas fantásticas y lo épico de su música subió a muchos (frikis y no tanto) al tren del metal. Y por ello, claro, tienen mi agradecimiento y mi aprecio más sincero.


Marc Wallace (vocalista de Drakum y Icestorm)

Conocí a Blind Guardian un poco tarde ya en su larga carrera, y fue a través de un compañero de trabajo que más tarde se convirtió en amigo por la similitud de gustos musicales que teníamos. Era allá por el año 98, yo era ya muy fan de Tolkien y había leído El Hobbit y El señor de los anillos, cuando mi amigo Arnau, me habló de un grupo que acababa de sacar un album dedicado al mundo de Tolkien y en concreto al libro The Silmarillion. Cuando escuché aquello, se me cayeron los huevos al suelo. Jamás había escuchado un album conceptual tan brutalmente elaborado y se puede decir que fue mi puerta de entrada al mundo del metal épico.

Recuerdo el «Imaginations from the other Side» como algo rompedor. Cuando me zambullí en la discografia de Blind Guardian, Imaginations se convirtió en un de los top 3 de mis discos favoritos. Supongo que por la capacidad que tiene de transportarte a otros mundos y hacer volar tu imaginación. Con baladas tan bellas como » A past and a future secret » o temazos tan potentes como » The script for my requiem «. Junto con Nightfall in Middle Earth, efectivamente pienso que son sus 2 mejores discos. Supongo que hizo falta sacar una obra de arte como es el Imaginations para poder tener después un Nightfall. Así que sí, es sin duda su disco definitivo.

Me atrevería a decir que es uno de los grupos que más me han influido musicalmente. Me abrieron las puertas de un mundo que hasta entonces era desconocido para mí y desde entonces se convirtieron en referentes musicales y también a la hora de componer. A nivel de la escena, siempre he pensado que Blind Guardian no está en el lugar que merece. Creo que deberían ser tratados como uno de los grandes con mayúsculas, por su larguísima trayectoria, la calidad de sus directos y por la complejidad de sus composiciones.

Recuerdo que lo conocí en medio de una época de descubrimientos, una época en la que el power metal dominaba los cielos, y el panorama musical era bestial a nivel de power sobretodo. Para mí fue una época dorada del metal, en la que cada muy poco descubría grupazos bestiales. Tendría 17 años cuando descubrí Blind Guardian así que también era una época en la que todo me flipaba mucho más por la edad. Pero el recuerdo que tengo ligado a Blind Guardian es un tesoro.


Carlos Z (guitarrista de Xeria)

¡Hola! Soy Carlos Z, guitarrista de Xeria. Es un placer para mí poder participar en este homenaje de los 25 años del Imaginations from the Other Side. Fueron uno de mis grupos de referencia hace mucho tiempo… ¿25 años ya?

Recuerdo leer la crítica del Imaginations from the Other Side en la Kerrang! Por aquella época, en cuanto a Metal, yo venía del heavy algo más clásico, Iron Maiden y Judas Priest, y se me empezaba a quedar corto. Echaba de menos un poco más de complejidad, de arreglos, y de potencia. Estaba empezando a descubrir el power metal de Helloween. En una época en que la portada de la Kerrang! eran los Kurt Cobain, la crítica del Imaginations hablaba de coros, de arreglos complejos, de potencia y de épica, e inmediatamente me encajó, sonaba exactamente como el estilo que estaba buscando. El limitado presupuesto en la época hizo que no comprara el disco inmediatamente, pero en cuanto escuché “Bright Eyes” en la Emisión Pirata, vi que era todo lo que prometía, y rompí la hucha para salir a por él.

Blind Guardian son de esos grupos más bien camaleónicos, un tanto inclasificables, como Queen, como Héroes del Silencio, que están a caballo entre varios estilos y son difíciles de imitar. Imaginations tiene un poco de todo, empezando por los ramalazos thrash en «I’m Alive», coros apabullantes, doble bombo demoledor, arreglos progresivos y estructuras muy poco lineales. Yo diría que es irrepetible. No es el power lineal de estribillos tipo Helloween que luego recogió Stratovarius. No es el power agresivo y crudo de Grave Digger. No es por supuesto Dream Theater, pero las estructuras y los arreglos huyen de las formas típicas. Es un disco único.

Aunque han sido uno de mis grupos favoritos, musical y estilísticamente he acabado no siguiendo mucho su estela, me he quedado probablemente en un terreno más melódico. Hay dos cosas importantes que aprendí con ellos que creo que son fundamentales: primero, la importancia de los temas. En una época en la que todo el mundo se pegaba por tocar más rápido y cantar más agudo, ellos se volcaban en hacer composiciones redondas. Y segundo, la originalidad. Han experimentado con todo tipo de texturas, estructuras, instrumentaciones y locuras, creando un sonido propio y siendo los primeros en casi todo. Hay muchos grupos influidos por Blind Guardian, pero muy pocos que suenen parecido.

En cuanto a la escena, ellos han sido el grupo que definitivamente asentó la idea de la épica en el metal, los coros, las orquestaciones. Son probablemente el grupo que más ha influido en el metal que se escucha ahora. El sonido de gente como Nightwish o Symphony X, por ejemplo, no se puede entender sin Blind Guardian.

He escuchado sus discos hasta rayarlos y en una época de mi vida han sido los más grandes para mí. Desde hace tiempo mis gustos van por otros derroteros, pero, por ejemplo, mi actual guitarra principal, una Aviator roja, está basada ligeramente en mis memorias de la infancia de la ESP de André Olbrich. Durante años tuve en la habitación un poster de André con esa preciosidad en las manos.

No se si es el definitivo, aunque quizás sí sea el más equilibrado. Somewhere Far Beyond no es tan original, y hay quien podría decir que Nightfall in Middle Earth quizá peca un poco por exceso. Antes de esos tres, en su estilo todavía se identificaba la mezcla de influencias, y de ahí en adelante, en mi humilde opinión, aunque han sacado buenos discos, han tenido problemas en conseguir temas memorables. No ha vuelto a haber un «Into de Storm», ni un «Bright Eyes», ni un «Mirror Mirror», ni un «Journey Through the Dark»… Tendría problemas en escoger uno de estos tres álbumes como el más representativo de Blind Guardian. Sin embargo, por motivos históricos, probablemente Imaginations sí que es su obra cumbre. Es la que les catapultó a la primera línea, es en la que asientan por fin su sonido más propio y más identificativo.

El Imaginations me pilló en la adolescencia, descubriendo la música, el metal, los conciertos, los garitos, los amigos… la vida en general. Qué voy a decir, que tengo recuerdos estupendos, y que asocio muchos momentos especiales a «A Past and Future Secret”, por ejemplo. Además de las experiencias personales, a nivel musical creo que fue una época curiosa porque el metal clásico, por llamarlo de alguna forma, había pasado de moda. Ya no era la música con ese aire cool y canalla que fue en los 80. A mediados de los 90 la explosión del grunge primero y del new metal después se lo había tragado todo, y creo que los que teníamos gustos más clásicos pasamos a vivir un poco en la sombra. Piénsalo, ¡es que en la Metal Hammer de repente se hacían reviews de discos acústicos de Alice in Chains, y en los catálogos de Ibanez salían Head y Munky al lado de Frank Gambale!

Antes de despedirme me gustaría resaltar también un aspecto que siempre me llamó mucho la atención de Blind Guardian, y es su honestidad y su sencillez. En el mundo del rock, acostumbrados a las estrellas histriónicas y megalómanas, ellos siempre me dieron la impresión de ser fundamentalmente músicos que amaban lo que hacían y que estaban bastante apartados del aparentar y del tren del sexo, drogas y rock and roll. Hansi Kürsch es un frontman que siempre ha caído muy simpático, y el grupo en general nunca ha “meado fuera del tiesto” que yo sepa.

Quiero despedirme agradeciéndoos esta oportunidad de hablar de uno de los grupos que más me han marcado y a los que más cariño les tengo. ¡Un saludo muy fuerte a todos!

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